Efectivos de los Grupos de Rescate e Intervención en Montaña (Greim) de la Guardia Civil y la Unidad Militar de Emergencias (UME) han encontrado este viernes el cuerpo sin vida de Cole Henderson, el joven montañero estadounidense que había desaparecido hace prácticamente un mes en Ordesa.
El cadáver ha sido localizado a las 13.15 en una zona de difícil acceso y de unos 200 metros de caída en la cara norte de Monte Perdido, en el término municipal de Bielsa.
Según la Guardia Civil, el cuerpo de Cole presentaba signos no compatibles con la vida, siendo evacuado por la Unidad Aérea de Benasque, mediante un ciclo grúa y trasladado a la helisuperficie de Boltaña, donde esperaban los servicios funerarios para llevarlo al Instituto de Medicina Legal de Zaragoza para confirmar su identidad.
A Cole se le perdió la pista cuando dejó su coche en Torla antes de empezar una ruta por el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Desde entonces, nada más se había vuelto a saber de él.
El dispositivo de búsqueda comenzó el pasado 14 de julio. Henderson, recuerdan desde la Guardia Civil, tenía previsto volver a su domicilio en los Países Bajos el pasado día 12, lo que hizo saltar todas las alarmas.
La búsqueda ha dado este viernes sus frutos en la cara norte de Monte Perdido.
Inmediatamente, la Guardia Civil de Huesca activó un dispositivo de búsqueda, catalogado como Operación de Rescate Complejo (ORC), en la que participaron efectivos del Greim de Aragón, Navarra y Lérida, así como Unidad Aérea de Benasque, guías caninos, perros de búsqueda de personas y pilotos de drones, recorriendo los tres sectores (Pineta, Añísclo y Ordesa) del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
En los días posteriores se ha continuado con la búsqueda, en la que se ha ampliado con personal de diferentes unidades de Guardia Civil, como el Equipo PEGASO y el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Zona de Aragón.
Parte del dispositivo de búsqueda.
Este pasado 2 de agosto, la Unidad Militar de Emergencias (UME) se sumó al dispositivo apoyando con personal especialista en montaña, servicio cinológico, operadores de drones y su servicio aéreo que, junto al resto de efectivos de Guardia Civil, han recorrido de forma conjunta y muy activa, las zonas de más difícil acceso y mayor requerimiento técnico del Parque Nacional.
A Cole se le ha buscado en pozas, barrancos, rimayas… Sus padres también han llegado a estar un par de semanas sobre el terreno, aunque ahora habían vuelto a su país.
