Hasta 27 nuevos grados de Formación Profesional se impartirán el próximo curso 2025/2026 en Aragón. La mayoría serán enseñanzas vinculadas con la tecnología y las ramas STEM, apostando también por una educación en el ámbito rural, de forma que la Comunidad ya cuenta con 26.700 alumnos matriculados en los distintos grados de FP y, a partir de septiembre, se crearán otras 1.560 plazas.
Con estas nuevas enseñanzas, desde el Gobierno de Aragón se pretende seguir apostando por la FP como una formación directa, más ágil y atendiendo las demandas y necesidades de las empresas. “Es una oferta exigente con novedades, que nos hace estar cerca de las necesidades de la comunidad, vinculadas a la tecnología y al ámbito rural”, ha apuntado el director general de FP, Luis Mallada.
Entre estos nuevos grupos, se incorporan seis programas de especialización, como el vinculado al mantenimiento y seguridad en vehículos híbridos y eléctricos u otro de gestión integral de centros de datos, que se desarrolla de la mano de Amazon Web Services y que incluye horas de formación en sus centros de datos. “En la actualidad no hay ningún grado que pueda aglutinar esa formación”, ha señalado Óscar Sánchez, jefe de Servicio de FP.
Asimismo, se incluirán ocho nuevos grados básicos, como industrias alimentarias, electricidad y electrónica, informática de oficina, o conservación en instalaciones deportivas; cuatro grados medios, como farmacia y parafarmacia, o soldadura y calderería; y ocho grados superiores, como ganadería y asistencia en sanidad animal, mecatrónica industrial o, por primera vez en Aragón, una doble titulación en dirección de servicios, restauración y cocina. Todas ellas estarán repartidas por instalaciones y ubicaciones de todo el territorio, algunas “debutantes” y otras que ya se impartían en otros puntos.
En este sentido, desde el Departamento de Educación se están planteando crear ciclos “itinerantes”, que se desplacen por el territorio según las necesidades puntuales de las empresas de cada zona. “Nos gustaría implementar ciclos que, cuando se lleven al entorno rural y se agoten por las necesidades empresariales de la zona, se puedan llevar a otro ámbito rural que también tenga esas necesidades. Estarán, darán un servicio y, cuando estén consolidados, se llevarán a otro sitio”, ha explicado Mallada. Todavía no se han decidido cuáles serán los primeros que se prueben.
Con ello, en el Gobierno aragonés ya miran con optimismo el reto de superar los 30.000 alumnos de Formación Profesional, incluso en el siguiente curso, si bien remarcan que lo importante no es alcanzar una cifra, sino que la enseñanza sea “de la mayor calidad”. “Lo que más nos preocupa es una implantación sostenible, de calidad y eficiente”, ha remarcado Mallada.
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