Elena Allué no volverá al Partido Aragonés. La diputada autonómica descarta presentarse como candidata y competir contra Alberto Izquierdo para liderar el PAR. Es una decisión que tiene "clara" desde hace tiempo y que no ha comunicado hasta la fecha "para no influenciar al resto" de compañeros. "Ya no es el partido en el que milité desde joven ni me representa", asegura en declaraciones a EL ESPAÑOL DE ARAGÓN.
En su día quiso dar un paso al frente al considerar que el partido "debía dar un giro y volver a su esencia" con un equipo "coral" que "quería trabajar el aragonesismo desde las raíces". Todo cambió con un congreso que acabó en los tribunales y que terminó siendo anulado por la Justicia, dejando al PAR en un limbo de difícil solución.
Para Allué, que concurrió a las últimas elecciones autonómicas en las listas del PP como independiente, el congreso -en el que se enfrentó a Arturo Aliaga-, fue directamente "dinamitado" por las "múltiples irregularidades que hubo". "No lo digo yo, lo dice la sentencia. No hay otra tan ejemplarizante en España como esta", afirma.
En su opinión, el fallo debe servir para que los principios democráticos "no se vulneren nunca más". "Cuando empiezas un proceso, lo haces con la mayor de las ilusiones. Pero han pasado tres años desde el congreso y una ya no es la misma, y la situación tampoco", admite.
Allúe, que ya no milita en ninguna formación, cree que "se ha pervertido un partido con 45 años de historia" con "unos "personajes" que están "señalados con nombres y apellidos en la sentencia". "Permitieron un pucherazo y siguen sin aceptar los hechos ni pedir perdón a la militancia", expone.
La diputada anunció recientemente la disolución de Aragoneses, la escisión fundada por los críticos del entonces vicepresidente de Aragón. Todo este tiempo lo ha aprovechado para hacer su propia reflexión. "Yo no creo que el PAR de ahora sea mi PAR", señala.
Su decisión pasa por mantenerse "apartada" de este proceso. "Yo ya tomé la decisión, disolví a Aragoneses para que la gente actuara con libertad. Si las personas que forman parte de Aragoneses y de la ejecutiva quieren volver, lo respeto absolutamente y espero y deseo que algún día las cosas se puedan arreglar, aunque creo que ya no tienen arreglo", agrega.
Según cuenta, ella tiene intención de seguir ejerciendo su "aragonesismo": "No voy a dejar de ser aragonesista. Eso lo llevo en la sangre y lo haré desde una posición individual e independiente". Todo este proceso, admite, ha sido "muy duro". "He sufrido mucho, hemos estado muy expuestos. También siento cierta nostalgia de lo que fue ese partido y pesar de que esas personas que cometieron las irregularidades no den un paso atrás", añade.
Preguntada por el futuro del partido, dice que "al PAR que ya no es el PAR" no le augura futuro siquiera. "Esa es la pena, que se hayan cargado un partido de 45 años de historia, que ha sido fundamental en el progreso de esta comunidad autónoma", recalca.