El alcalde de Albacete, Emilio Sáez, está dando un impulso de gigante a la ciudad con iniciativas que buscan la eficacia y la calidad para hacerla más próspera, más habitable, más atractiva y más conocida en todo el mundo. Y ese impulso pasa, como otras muchas cosas, por la Feria, una de las grandes de España.

Como la Feria de 2022 va a ser la más “importante de los últimos años”, Sáez ha elegido una pregonera a la altura de las circunstancias, la cantautora y paisana María Rozalén. “La opción de Rozalén fue la primera que nos planteamos y, ciertamente, no hubo que buscar otra porque la artista nos dijo que sí desde el primer momento", ha contado el alcalde, destacando de la artista "su compromiso con las gentes de Albacete, siempre está para ponerse al lado de quienes defienden causas justas y solidarias, y allá donde va ejerce de embajadora de esta ciudad y de esta provincia".

Considera también a favor de Rozalén que es una importante activista social y defiende con su música los derechos de las minorías y comunidades más desfavorecidas. Nadie reúne mejores condiciones.

¿Y cómo ha reaccionado Rozalén a la propuesta de pregonar la Feria de su ciudad? Pues muy bien, como era de esperar de alguien tan vitalista y tan apasionada por su tierra y por su gente, de alguien que hace patria allá por donde va. En sus cuentas de redes sociales ha expresado lo que esto supone para ella y ha tenido un recuerdo muy emotivo para su padre, Cristóbal Rozalén, fallecido a mediados de febrero: “Esto es de las cosas más emocionantes que voy a vivir en mi vida… Bien sé yo de uno que hoy sonreirá desde arriba. Os prometo currármelo a saco, para que os sintáis orgullosos de paisana”.

Solo le asalta una duda y es ver cómo supera a sus predecesores en la función de pregonera, sobre todo a uno de ellos, el humorista Joaquín Reyes, que dejó un gran recuerdo de su intervención hace ya ¡¡13 años!! Reyes hizo alarde de su particular humor descarado y atrevido para describir lo más típico de la Feria. Fue, según las crónicas de entonces, un pregón con el que todos los albaceteños se sintieron identificados y en el que no faltó una sorpresa musical final; al estilo manchego, por supuesto.

Rozalén se ha planteado la broma de superar a su amigo Joaquín Reyes. Y a su manera seguro que lo conseguirá.