En una sociedad cada vez más digitalizada, la ciberseguridad se ha convertido en uno de los principales problemas tanto para el mundo corporativo y las instituciones como para las personas a título individual.

La transformación digital que aceleró tras la pandemia del coronavirus ha ejercido como catalizador del salto al mundo digital y, con un mayor uso e implementación de herramientas digitales, se han creado múltiples puntos de entrada por los que a diario tratan de colarse los ciberdelincuentes.

La startup Internxt, uno de los referentes en nuestro país en el campo de la seguridad y la privacidad de los datos del usuario en internet, que emerge como una alternativa a gigantes como Microsoft o Google en este campo, da un paso al frente de nuevo para trabajar en la ciberseguridad que verá la luz de forma pública y comercial en los próximos años.

[Internxt avanza hacia el 'Olimpo bursátil' tras lograr una valoración de 40 millones gracias a Wayra y Srinivasan (elespanol.com)]

De la mano del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI) -que aporta 1,4 millones de euros-, la compañía liderada por el emprendedor valenciano Fran Villalba, perteneciente a la nueva cantera de talento emprendedor de esta región que sigue la estela de nombres propios en el ecosistema como Iker Marcaide, arranca este 2024 una etapa apasionante en la que aspira a desarrollar algoritmos de encriptación postcuántica.

"Los algoritmos de encriptación ahora existentes serán vulnerables y podrán ser descifrados, dada la potencia de computación de dichos nuevos ordenadores. Nuestra propuesta está basada en la seguridad y privacidad absoluta y es crucial para nosotros estar preparados para esta era postcuántica, lo que nos permitirá seguir estando a la vanguardia", afirma a DISRUPTORES - EL ESPAÑOL Fran Villalba, CEO de Internxt.

Fran Villalba, CEO de Internxt, en los exteriores de la aceleradora Lanzadera, en la Marina de Valencia.

Con la financiación lograda de la mano del CDTI, Internxt prevé avanzar en esta línea y lanzar nuevos servicios para su suite centrada en la privacidad. Se trata de Internxt Meet, un servicio de videollamadas encriptadas; Internxt Mail, un servicio de correo encriptado; e Internxt VPN, una VPN encriptada. "Estos servicios se sumarán a los actuales que ya ofrece la compañía; Internxt Drive y Send", indican desde la startup.

Según confirma a esta redacción Villalba, la previsión es contar con estos algoritmos para finales de 2025, un esfuerzo que sería imposible asumir sin nuevo talento en el equipo, conformado por más de 30 empleados.

Para ello, Internxt ya ha reforzado su plantilla, con talento 100% español, entre el que se encuentran varios doctores en ciberseguridad e inteligencia artificial.

"Asimismo, hemos reforzado nuestro equipo de ingenieros con más perfiles procedentes de empresas punteras en el sector, para poder acelerar el desarrollo de estos nuevos productos y tecnologías", matiza el CEO.

Encriptación 'zero-knowledge': la clave

La encriptación zero-knowledge es una de las señas de identidad de los servicios de Internxt, que les diferencia de servicios alternativos a los que ofrecen compañías como Google o Microsoft, y que se mantendrá en esta nueva etapa que ahora inicia.

A diferencia de estas tecnológicas, Internxt encripta toda la información del lado del cliente, sin guardar la clave de desencriptación.

"Los gigantes tecnológicos con los que Internxt compite son gigantes de los datos y la publicidad, cuyos servicios son en realidad un medio para un fin, y no un fin por sí mismos. Internxt está centrada en crear un mundo digital que respete la privacidad del usuario", precisan desde la startup valenciana.

Y es que la ciberseguridad marcará el devenir del sector tecnológico en Europa y a escala global, un escenario en el que Internxt aspira a contribuir a un óptimo posicionamiento de España.

"Intenxt, que ya trabaja de la mano del INCIBE, es una muestra clara del compromiso con el avance tecnológico responsable y seguro por el que apuestan los Estados de la Unión Europea"

Fran Villalba, CEO de Internxt

"La OTAN está haciendo mucho hincapié en este tema para poder defender la soberanía de sus aliados frente a ataques de terceros países. Tanto es el caso, que hace escasas jornadas fue noticia que la OTAN elegía al INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad de España) como hub de aceleración de startups mundial de ciberseguridad de la Alianza Atlántica", relata Villalba.

Y añade: "Internxt, que ya trabaja de la mano del INCIBE en varios programas, es una muestra clara del compromiso con el avance tecnológico responsable y seguro por el que apuestan los distintos Estados de la Unión Europea".

En esta línea, Villalba reconoce que la empresa media española y el ciudadano aún no son plenamente conscientes del potencial de la computación cuántica, aunque está convencido de que España debe jugar un papel protagonista en el futuro.

"Aún no es algo de lo que estemos plenamente concienciados, dado que se sigue viendo como bastante lejano. Pero la realidad es que la computación cuántica verá la luz a nivel público y comercial durante los próximos años".

Fran Villalba prevé que Internxt cierre 2024 con una facturación superior a los cuatro millones de euros y unos 40 empleados.

"Esto marcará un antes y un después para las empresas tanto a nivel de seguridad, dado que tendrán que elevar exponencialmente sus mecanismos contra ataques procedentes de dichas máquinas, como a nivel de posibilidades de procesamiento para aquellas empresas que puedan trabajar con estas máquinas", concluye. 

Internxt afronta esta nueva etapa tras recorrer ya un camino en el que ha estado acompañada de protagonistas del ecosistema emprendedor en España. Así, está participada entre otros por Wayra -el venture capital de Telefónica-, Notion Capital y Angels Capital -sociedad de inversión de Juan Roig-, y prevé cerrar 2024 con una facturación superior a los cuatro millones de euros y alrededor de 40 empleados.

El reto que afronta es mayúsculo, pero el potencial de la startup valenciana también y, además, apostando por talento español como uno de sus principales activos. Todo un ejemplo de la nueva generación de startups españolas, mucho más maduras y consolidadas.