El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha respaldado el Plan Especial de Hospedaje elaborado por el anterior Gobierno municipal de Ahora Madrid, con la exalcaldesa Manuela Carmena al frente, que buscaba frenar la conversión de los pisos en alojamientos turísticos.

El Alto Tribunal madrileño desestima quince recursos interpuestos contra este plan, siendo resueltos ayer por el Pleno de lo contencioso-administrativo, de las secciones Primera y Segunda. Las sentencias cuentan con un voto particular y contra ellas cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.

En una de las sentencias, a las que tuvo acceso Europa Press, se desestima el recurso interpuesto por la representación de la Asociación de Gestores de Viviendas de Uso Turístico (ASOTUR) contra los Acuerdos de la Comisión de Seguimiento del PGOUM de 23 de marzo de 2018, de dos Juntas de Gobierno de la Ciudad de Madrid, por el que se acordaba la suspensión automática derivada de la aprobación inicial del citado Plan Especial de Hospedaje.

Cupos y acceso desde la calle

El anterior Gobierno municipal anunciaba en 2018 que su pretensión era fijar cupos en la concesión de licencias a viviendas de particulares que quieran ser alquiladas al turismo más allá de tres meses al año, cupo que vendría fijado por la capacidad de los barrios.

La idea era que el Ayuntamiento de Madrid regulara los pisos turísticos permitiendo el alquiler de viviendas de particulares durante un tope máximo que no podrá llegar a los 90 días al año. Más allá de ese plazo exigirán licencias para poder ser alquilados.

Calculaba entonces el Gobierno municipal que ilegalizaría el 95% de las viviendas turísticas del distrito Centro al exigir, entre los requisitos, un acceso independiente desde la calle dentro del plan de usos de alojamientos turísticos.

Con dicho plan se exigiría a las viviendas de uso turístico en la capital que cumplan los mismos requisitos que hoteles y apartamentos turísticos, el mismo instrumento que establecería áreas de actuación para hacer frente al mobbing inmobiliario en edificios residenciales, práctica con la que se pretende expulsar a los vecinos.

En función de esta nueva división, el Área 1 correspondería al distrito de Centro; el Área 2 afectaría a los distritos de Chamberí, Arganzuela, parte de los distritos de Salamanca y Retiro y el barrio de Argüelles en el distrito de Moncloa-Aravaca; el Área 3 atañería al resto de la almendra central y zonas de Puerta del Ángel, Príncipe Pío y Chamartín y, finalmente, al área 4 pertenecería el resto de la ciudad de Madrid. El plan valora una regulación más o menos restrictiva para cada una de las nuevas áreas.

No se detectan excesos

En la resolución, los magistrados señalan que "ningún elemento aporta la recurrente que permita colegir que la suspensión automática no se haya ajustado a la normativa urbanística que le proporciona la adecuada cobertura o que se haya producido un exceso en la misma".

Además, avala "el establecimiento de límites al acceso a la actividad económica concernida o a su ejercicio de conformidad con lo que prevé el artículo 5 LGUM --Ley de Garantía de Unidad del Mercado--", agregando que se trata de "límites que tanto para el Tribunal de Justicia como para el Tribunal Supremo satisfacen las exigencias del principio de necesidad en supuestos análogos y sobre cuya proporción o si constituyen el medio menos restrictivo o distorsionador para la actividad económica".

En noviembre de 2019, el TSJM rechazó que saliera una suspensión cautelar de este plan, buscando los recurrentes paralizar de forma cautelar el acuerdo de 27 de marzo de 2019 del Pleno del Ayuntamiento de Madrid, por el que se aprobaba el Plan Especial de regulación del uso de servicios terciarios en la clase de hospedaje, distritos de Centro, Arganzuela, Retiro, Salamanca, Chamartín, Tetuán, Chamberí, Moncloa-Aravaca, Latina, Carabanchel y Usera.

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