Mercedes Rivera I. P. Nova

La quinta ola de la Covid-19 es ya una realidad. Con la incidencia disparada a 277 casos por 100.000 habitantes, la pandemia vuelve a agravarse en España. Y una de las razones es la variante Delta, que ya supone el 60% de los nuevos contagios.

Así lo han indicado fuentes autonómicas a Invertia. Las comunidades se muestran preocupadas ante el rápido incremento de los nuevos casos. Y es que, en las últimas 24 horas, se han registrado 17.317 nuevos contagios.

Según los cálculos de las comunidades autónomas, la presencia de la variante Delta de la Covid-19 supone ya "entre el 50% y el 60% de los nuevos casos".

De hecho, las regiones ya vienen advirtiendo hace días del aumento de la incidencia de esta variante, que ya es predominante, por ejemplo, en Madrid. A pesar de este incremento, lo cierto es que las autonomías no prevén que vaya acompañado de una subida de los ingresos hospitalarios.

De hecho, la ocupación de camas hospitalarias por pacientes con Covid apenas es del 2,35% a nivel nacional. Una cifra que se ha mantenido en estos últimos días en los que los contagios se han disparado, mayoritariamente, entre la población más joven.

Atención primaria desbordada

Aunque este incremento de los casos no esté afectando a los hospitales, sí está desbordando la atención primaria. Es en este servicio donde se realizan las pruebas de diagnóstico de la Covid-19 y su posterior rastreo y seguimiento de los casos.

La atención primaria "está sobrecargada debido a las altas tasas de incidencia que tenemos actualmente", ha explicado a este periódico Vicente Martín, vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen).

Aunque el número de PCR depende de cada centro y de la incidencia de cada región, Martín cifra en hasta 400 pruebas diarias las que se vienen haciendo en un área de salud en los últimos días.

"Está habiendo muchos positivos", ha reconocido el portavoz de Semergen. Y prevé que esta situación se dilate "entre tres y cuatro semanas más", por lo que la incidencia no podría empezar a controlarse hasta primeros de agosto.

Una trabajadora sanitaria realiza una prueba PCR. EFE/Salvador Sas

Según la última actualización del Ministerio de Sanidad, en el periodo comprendido entre el 27 de junio y el 4 de julio, la positividad de las pruebas diagnósticas es del 10%. Es decir, una de cada diez PCR o test de antígenos tiene un resultado positivo en Covid-19.

Una cifra que sube al 12% según los datos del 5 de julio, día en el que se realizaron casi 100.000 pruebas (entre PCR y antígenos), de las que 12.000 fueron positivas.

El Ejército vuelve a rastrear casos

Ante el incremento de los contagios, el Ministerio de Sanidad ha pedido ayuda a Defensa, solicitando de nuevo la colaboración de los militares para el rastreo de los casos.

El Ministerio de Defensa aportará, por lo pronto, más de 200 nuevos profesionales que, uno a uno, llamarán a quienes hayan dado positivo para realizar el seguimiento de sus contactos estrechos. Operarán en Baleares, Comunidad Valenciana, Canarias, Cantabria y Castilla y León.

Precisamente el rastreo de los contagios entre los jóvenes está siendo una tarea difícil. "No saben quién les ha contagiado ni a quien han podido contagiar", explicaba Vicente Matas, del sindicato médico CESM y especialista en Medicina de Familia, a este periódico.

Esta realidad complica el trabajo de los rastreadores, que encuentran serias dificultades para seguir la cadena de transmisión de los brotes. Una labor que se antoja crucial para lograr contener la transmisión de la Covid-19.

Noticias relacionadas