Finales de 2018. Tras las bruscas caídas vividas en los mercados, el consenso de analistas tenía claro que, aunque con más prudencia que otros años, la renta variable sería el único activo de ‘devolver’ parte de lo perdido este 2019. De momento, los pronósticos se cumplen con subidas en los principales parqués del globo, pero con una volatilidad mucho más extrema de lo esperado. 

Durante el encuentro informativo ‘2019, ¿el año de la renta variable?’ organizado por Investing.com en Madrid, los expertos coincidieron en que la segunda mitad del año será más positiva para las bolsas, con mejores perspectivas para Europa que EEUU y, sobre todo, con la necesidad de ser extremadamente selectivos tanto con los valores como con el momento elegido para entrar en el mercado. 

Javier Martín Carretero, director del comité de inversión de Ursus Capital, fue el más escéptico con la recuperación de los mercados a corto plazo. “Es previsible que las bolsas recorten a valoraciones de diciembre”. Para el experto, el momento de desaceleración del ciclo económico “no es compatible con los elevados múltiplos actuales". Recuerda que los niveles alcanzados recientemente por índices como el S&P 500, “se deben a estímulos difícilmente repetibles, como las exenciones fiscales o el proteccionismo”, por no hablar de las políticas monetarias ultraexpansivas de los bancos centrales.

APROVECHAR EL 'DESAJUSTE'

Este ‘desajuste’ entre un menor crecimiento económico y las subidas bursátiles obliga a los inversores a ser muy selectivos para evitar la catástrofe en sus carteras. Y los expertos apuntan a grandes valores para capear el temporal que se avecina. “Telefónica, Repsol o Ferrovial pueden ayudarnos a ganar frente a riesgos como el Brexit o la guerra comercial”, indica Victoria Torre, responsable de Desarrollo de Contenidos, Productos y Servicios de SelfBank. Para la experta, es fundamental estar en sectores de alta rentabilidad por dividendo, defensivos y con menos volatilidad, donde también entran las eléctricas como Iberdrola.

Gisela Turazzini, CEO de Blackbird Broker, coincide en meter a la operadora presidida por José María Álvarez-Pallete en su lista de ‘recomendaciones’. “Nos gusta desde que bajó a los 7 euros y seguimos queriendo a la compañía en cartera”, asegura la experta. “Telefónica, junto con el sector bancario, presentan síntomas de cambio de tendencia tras años de turbulencias bursátiles”, insiste. 

Talgo es otra de las compañías que incluye entre sus valores favoritos. “La compañía se encuentra en un ciclo de beneficios expansivo, además de haber presentado un programa de compra de acciones récord que tiene como fin reducir el capital en un 16%”, indica. Los analistas apuntan además a los nuevos contratos conseguidos por la compañía, que además pertenece a un “sector en auge que está recibiendo fuertes inversiones". 

¿HAY QUE APROVECHAR EL BAJÓN DE LOS BANCOS?

En el momento actual, y tras la reciente corrección, también apuestan por el sector bancario español, después de la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de suavizar la tasa de depósitos a las entidades. “La valoración de los bancos está en mínimos, cercana a 0,7 veces su valor contable y se espera un fuerte crecimiento del beneficio por acción cuando el BCE anuncie la normalización monetaria en 2020”, indica la experta. 

Santander, BBVA y, contra todo pronóstico, Sabadell, son sus apuestas dentro de la industria. Los expertos consideran que las tres han hecho bien los deberes en materia de ‘desintoxicación de balance’ con la venta de activos tóxicos. En el caso concreto del Sabadell, Turazzini considera que el mercado ya ha descontado los problemas con su filial británica TSB. 

Algo más escépticos se muestran con el sector Victoria Torre y Javier Martín Carretero, ante el giro en el mensaje de la Fed y del BCE por el evidente miedo a la desaceleración económica. En este sentido, los tres expertos coincidieron en cómo el margen de actuación de las políticas monetarias es muy limitado para impulsar el crecimiento. "El margen de actuación es muy limitado y existe un evidente chantaje del mercado a la Fed", explican. A juicio de Javier Martín, la clave está en que tanto Mario Draghi como Jerome Powell "sean capaces de mantener la credibilidad de los inversores". "Están para eso, para que cuando todo el mundo entre en pánico, ellos transmitan tranquilidad", insistiendo en que, para encontrar oportunidades, "hay que dejar que corrijan las sobrevaloraciones".