COMO LEONES: Wolfgang Beck (Testa Residencial) y Juan Carlos Escotet (Abanca)

Empresas

2 abril, 2018 01:45

Los bancos confían en que Wolfgang Beck repita en Testa el éxito logrado en Alemania y Austria

Hasta Alemania se han ido los grandes bancos españoles -Santander y BBVA- para fichar a Wolfgang Beck. El directivo elegido para, primero, lanzar la salida a bolsa de Testa Residencial y, después, convertir la socimi en uno de los principales arrendatarios de vivienda en España.

Bajo la recomendación de Ismael Clemente, consejero delegado de Merlin, llega Beck a Testa con las mejores credenciales, tras haber puesto las bases para convertir Vonovia en el mayor casero residencial de Alemania. Una empresa que forma parte del selectivo índice Dax 30 de la bolsa de Francfort, con una capitalización que roza ya los 20.000 millones de euros gracias a las cerca de 500.000 viviendas que forman su cartera.

Además de la conversión de la inicial Deutsche Annington en la actual Vonovia, quintuplicando por el camino el valor de mercado, Beck también ha sido responsable de que Immobilien Invest, valorada en 3.000 millones de euros, se haya convertido en la segunda mayor compañía de alquiler residencial en Austria, con unas 25.000 viviendas en propiedad.

Escotet impulsa Abanca con la compra de Deutsche Bank PCC Portugal

Abanca ha adquirido la unidad de banca de particulares de Deutsche Bank Private & Commercial Client (PCC) en Portugal, especializado en el segmento de banca personal y privada. La operación, de la que no se ha dado a conocer el importe, culminará en el primer semestre de 2019, tras recibir las autorizaciones necesarias y concluir la integración tecnológica de ambas entidades.

El negocio comprado por Abanca consiste en 41 oficinas comerciales distribuidas por el país luso, principalmente en Lisboa y Oporto, de las que cuatro son centros de inversión y dos oficinas de banca privada. Abanca, que ha resultado ganadora en el proceso formal de venta de la entidad en Portugal, reforzará así su presencia en el país luso, en el que cuenta actualmente con cuatro oficinas.

La filial portuguesa de Deutsche Bank dispone de una cartera crediticia bruta de 2.400 millones de euros, 1.000 millones de euros en depósitos y 3.100 millones de euros fuera de balance, con lo que su volumen de negocio asciende a 6.500 millones de euros.