Este lunes 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, habrá menos variedad floral con la que recordar a quienes ya no están. Además, honrarles con flores nos costará más que otros años.

El sector de la flor cortada tiene una oferta más reducida este año. Los floricultores iniciaron meses atrás la producción de flores para este día tan señalado, pero este año, debido a la incertidumbre de la Covid-19, muchos de ellos optaron por sembrar hortalizas en lugar de flores por su menor precio.

Habitualmente se dedican a este cultivo unas 350 hectáreas de la costa noroeste de Cádiz y unas 80 en la comarca del Bajo Guadalquivir. Este año las hectáreas dedicadas al cultivo de flores se han reducido en un 50%, según ha explicado el responsable de la flor cortada de COAG, Luis Manuel Rivera.

El sector nacional de la flor cortada tiene su epicentro en Chipiona (Cádiz), ubicación que en sus mejores tiempos disponía de 1.200 hectáreas exclusivas para este tipo de producciones. “El año pasado se tuvieron que demoler muchos tallos y como la pandemia ha sido muy larga, este año muchos hemos dejado de cultivar flores”, reconoce Rivera.

Cultivo de flores. COAG

Con la libre movilidad entre comunidades y la celebración de entierros, bodas y otros eventos sociales, la demanda de este producto vuelve a ser similar a la de 2019. Sin embargo, a esta situación se le une la falta de agua en la cuenca del Guadalquivir, donde los embalses se encuentran en situación de emergencia debido a la actual reserva. Está previsto que este martes 2 de noviembre se active el protocolo de sequía.

“Realmente hemos tenido problemas de producción en Andalucía. En la parte de Chipiona han estado muy afectados y también se han tenido dificultades con el auto riego en la zona de Granada”, ha explicado a EL ESPAÑOL-Invertia María Castillo, presidenta de la Federación Andaluza de Floristas y Plantas.

Las flores de esta temporada otoñal se han visto muy afectadas por la falta de lluvias. Un ejemplo de ello son los nardos, que tienen su floración a principios de otoño, y que debido a esta escasez de precipitaciones han tenido una campaña muy corta. 

Falta de lluvia

Hasta este fin de semana, las únicas lluvias abundantes registradas en este otoño en Andalucía han sido torrenciales, como la DANA del 23 de septiembre. Unas inclemencias meteorológicas que perjudican gravemente a estos delicados cultivos. 

En otras ocasiones, los floristas importan el género de Portugal. Pero, la falta de agua también ha afectado al país vecino. Así lo ha apuntado la representante de los floristas andaluces, que insiste en que este año hay género internacional a “precios desorbitados”, debido a la subida del coste del transporte.

Varias floristerías familiares confirman a este medio que ahora les cuesta más caro comprar el material a sus distribuidores. “Hay de todo, pero menos cantidad y a mayor precio”, ha explicado Juan Manuel, dueño de Floristería María Luisa, un negocio familiar que lleva 33 años surtiendo de flores al barrio sevillano de Pino Montano.

“Se nota que hay menos producción. Las subastas se acaban rápido, pero conseguimos flores”, ha asegurado la presidenta de los floristas andaluces. 

El precio de la luz y del transporte

El incremento de la energía eléctrica y el encarecimiento del transporte son otros factores que asfixian a este sector. Las floristerías son negocios que emplean una fuerte iluminación para resaltar los colores de sus productos. 

Además, algunas plantas precisan de luz artificial para mejorar su floración y, en general, al ser transportadas precisan de camiones climatizados que les aseguren una determinada temperatura para no romper la cadena. 

Cultivo de flores en invernaderos. Noelia Ruiz

Castillo, que además de representante de los floristas cuenta con una tienda, asegura que ha pagado un 40% más por el recibo de la luz en los últimos meses. “Los cultivos necesitan luz artificial e iluminación para adelantar la floración y, en algunos casos, precisan de calefacción”, detallan desde la floristería María Luisa.

En general, esta fecha es buena para la facturación del sector y representa entre un 35% y un 40% de su caja anual, aunque el número de ventas se ve altamente condicionado por la climatología del Día de Todos los Santos

Las flores más vendidas en esta fecha son las de color blanco y rosa, frente a los ramos más coloridos rojizos y anaranjados propios de otras efemérides. Según la marca Interflora, los lirios, gerberas y margaritas son las flores favoritas para recordar a nuestros seres queridos.

Noticias relacionadas