La inversión española en conocimiento ha recuperado, una década después, los niveles previos a la crisis económica. Según los últimos datos publicados el Instituto Nacional de Estadística (INE) España invirtió en I+D un total de 14.946 millones de euros en 2018, una cifra similar a la de 2008 (14.700). Así, se produjo un incremento de 883 millones de euros respecto de 2017.

La tasa de crecimiento de la inversión en I+D se ha situado en el 6,3% interanual, por encima del 6,1% observado un año antes. Se trata de la cuarta tasa de variación positiva consecutiva, destacan desde la Fundación Cotec.

A esta evolución en positivo han contribuido tanto el sector público, por segundo año consecutivo, como sobre todo el privado por cuarto año consecutivo. En este sentido, destaca la apuesta creciente de este último, que en los últimos cuatro años ha incrementado su inversión en I+D en 1.678 millones de euros, hasta los 8.484 millones.

En todo caso, resalta el contraste entre un sector privado que ha superado de manera clara los niveles precrisis y un sector público que todavía no lo ha logrado, creciendo por debajo del PIB y, por tanto, perdiendo peso relativo.

Ante estos datos, Jorge Barrero, director general de Cotec, incide en que estos datos muestran una consolidación de la tendencia observada hace año. ”Un sector público estancado que se compensa con el dinamismo del sector empresarial. Necesitamos cuanto antes un nuevo Gobierno y unos presupuestos adecuados para que la investigación pública no se descuelgue de la recuperación”. 

El crecimiento de la inversión, combinado con la desaceleración del PIB nominal (que bajó del 4,3% en 2017 al 3,5% en 2018), ha conducido a un mayor peso de la I+D en la estructura productiva, hasta situarse en el 1,24% del PIB, tres centésimas más de lo registrado en 2017. La I+D gana peso en la estructura productiva por segundo año consecutivo.

No obstante, España sigue estando muy lejos del nivel máximo de inversión respecto al PIB previo a la crisis, que alcanzó el 1,35% en 2010, así como también del objetivo del 2% que el Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación mantiene para 2020, y que ya no es posible cumplir, lamentan desde la Fundación.