Desarrollan un avión no tripulado impulsado por energía solar, pensado para utilizarlo en misiones de vigilancia aérea en zonas de difícil acceso, "gracias a su gran autonomía de vuelo". Heliodron es un proyecto Aerosertec, el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) y el CTC que ya ha sido testado en una sesión de vuelo en cielo abierto, celebrada con éxito en Tenerife, tras realizar diversas pruebas en túneles aerodinámicos.

Heliodron tiene una gran autonomía de vuelo generada por las placas de carga fotovoltaicas incorporadas al diseño. Asimismo, este prototipo de dron no contaminante tiene, entre sus ventajas, "facilidad en el despliegue y bajo coste en el proceso de fabricación y operación"

Este dron incorpora un sistema de navegación con sensores GNSS INS, que proporciona a la aeronave no tripulada una solución de posición y orientación de "gran precisión y robustez" sin impedir un diseño con un peso, consumo y coste reducidos. De este modo, se ha conseguido sistema de navegación "redundante, modular y escalable".

"La incorporación de varios sensores coordinados mediante algoritmos supera el rendimiento de los sistemas más comunes, equipados habitualmente con un solo sensor", explican desde el CTC. Así, aunque el prototipo actual se maneja por radiocontrol, el objetivo final es que el dron sea autónomo.

Proyecto

 Esta iniciativa ha dispuesto de un presupuesto de 775.000 euros y pertenece a la convocatoria Retos Colaboración 2016, enmarcada dentro del Programa Estatal de Investigación, Desarrollo e Innovación Orientada a los Retos de la Sociedad del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2013-2016. El Ministerio de Economía y Competitividad es el responsable de esta iniciativa de financiación, cuyo objetivo principal es encontrar soluciones innovadoras que contribuyan a mejorar la competitividad del tejido empresarial del país.