Pedro Duque, ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, presentando el contrato ganado por la industria española.

Pedro Duque, ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, presentando el contrato ganado por la industria española.

Investigación

Galileo: la industria española protagoniza el mayor contrato espacial hasta la fecha

Un consorcio español se encargará del mantenimiento del control en tierra del sistema de satélites de geoposicionamiento Galileo, tras la adjudicación del contrato a la tecnológica GMV. La adjuciación, una de las cuatro más importantes en la evolución de esta red, está valorada en 250 millones de euros

6 septiembre, 2018 12:00

Fue hace 18 años cuando Europa decidió comenzar a explorar una alternativa al GPS, el sistema de geoposicionamiento por excelencia a escala mundial. ¿La razón? Esta red es norteamericana, de origen militar, y con una precisión no demasiado útil para aplicaciones industriales como la agricultura de precisión, el coche autónomo o en misiones de rescate.

El resultado de estas primeras aproximaciones fue el proyecto Galileo, una red de satélites de navegación de la Agencia Espacial Europea (ESA) compuesta por 24 satélites, 10.000 millones de euros de inversión conjunta y una precisión de alrededor de 20 centímetros y un metro (frente a los 5/10 metros del GPS). Una iniciativa que ya es funcional, presente en muchos dispositivos compatibles (desde receptores dedicados, como balizas, hasta smartphones o navegadores para vehículos).

En ese sentido, el director de Navegación de la Agencia Espacial Europea, Paul Verhoef, explica que "tenemos una gran dependencia de las redes de satélites de posicionamiento, actualmente del GPS norteamericana. Es una dependencia que llega a alcanzar el 10% de la actividad económica mundial; es una dependencia tan enorme del GPS que hasta las empresas de EEUU están preocupadas por ello y están muy contentas por la llegada de Galileo". Para Verhouef, Galileo tiene sentido en muchos sentidos "desde el económico, dependencia estratégica o social", por lo que se muestra satisfecho con que Europa haya podido coordinar esfuerzos y recursos para hacer realidad este ambicioso proyecto.

Una vez conseguido el hito, antaño imposible a juicio de muchos expertos, de poner en marcha esta red de satélites, ahora el siguiente reto es garantizar su operativa a largo plazo. Con ese fin, la ESA ha otorgado cuatro grandes contratos de mantenimiento y evolución de Galileo, de entre los cuales uno de ellos ha recaído en una compañía tecnológica española, GMV.

Se trata del contrato para ocuparse del Segmento de Control en Tierra de Galileo, y será ejecutado por el consorcio liderado por GMV e integrado también por Indra, Isdefe y Epicom. Esta parcela no resulta demasiado sexy en un principio, pero es fundamental en el día a día de estos satélites. No en vano, se encarga del seguimiento de toda la constelación mediante un centro de control, un sistema de dinámica orbital, la planificación de misión, soporte operativo, simulación seguridad o telecomando y control.

La adjudicación es la mayor lograda jamás por la industria espacial española, con un valor total de 250 millones de euros. De este montante, ya se conoce la primera orden de trabajo a GMV por importe de 150 millones y un plazo de ejecución de 3,5 años. Bajo estas grandes cifras, se esconde también un buen impacto en fuerzas laborales de alta cualificación: el 60% del trabajo de este proyecto recaerá en empresas españolas, creando unos 200 empleos directos en nuestro país.

Por su parte, el Ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, comentó que "la empresa privada está viendo lo interesante y rentable que es apostar por proyectos espaciales de la mano del sector público. Este contrato es síntoma de la madurez de la industria espacial en nuestro país y solo es el primero de muchos otros, porque España seguirá apostando por este sector e invirtiendo más por su enorme beneficio social, económico y en alto contenido tecnológico y de talento científico e innovador". Duque, quien también recordó su "vida pasada" como astronauta, también defendió el fuerte crecimiento en los prespuestos europeos en materia de innovación y se mostró convencido de que nuestro país seguirá siendo uno de los principales receptores de estos fondos.

La industria espacial española

La participación española siempre ha sido destacada. A este nuevo contrato hemos de unir el segundo centro de monitorización de la red, situado en Madrid, otro centro recién adjudicado de respaldo de seguridad de la constelación, así como la fabricación de partes de los propios satélites (a cargo de firmas patrias como Airbus, Thales o Tryo Aerospace) o la producción de smartphones compatibles con esta tecnología (BQ). En total, el sector del espacio en España tiene un volumen de actividad de 720 millones de euros, exporta el 74% de su facturación y crea más de 3.300 empleos directos de alta cualificación (64% ingenieros y licenciados y 27% técnicos).