El sector turístico se recupera. Según los últimos datos, en 2022 visitaron España cerca de 71,5 millones de turistas internacionales, casi un 86% del nivel previo a la pandemia, que produjeron un gasto de 87.100 millones de euros, apenas un 5,6% por debajo de ese período.
Sin embargo, los expertos señalan que esta senda positiva puede verse alterada en los próximos meses debido al contexto de incertidumbre que se avista, marcado por la subida de los precios como consecuencia de la inflación y en el que sigue desarrollándose la guerra en Ucrania.
Con el objetivo de poner un poco de luz sobre los meses futuros y de desentrañar cómo la tecnología puede ayudar en este camino, se ha celebrado FITURTECHY, la sección de FITUR especializada en innovación, sostenibilidad y tecnología en el ámbito turístico, que ha tenido lugar en IFEMA entre el 18 y el 20 de enero. Durante la misma, ha tenido lugar una ponencia centrada en cómo se pueden usar los datos en esta industria como palanca competitiva.
En ella, Lasse Rouhiainen, moderador de la mesa, ha explicado que, actualmente, hay diferentes formas de poner en valor la información como la utilizada por Estados Unidos, que pone el beneficio en el centro; la de China, centrada en el Gobierno; o la de Europa, donde el foco está puesto en los ciudadanos.
Rouhiainen ha señalado que la visión europea es la más beneficiosa, pero implica una ralentización a la hora de obtener provecho a través de los datos, ya que los proyectos deben cumplir una serie de estándares éticos y sostenibles.
Alberto Palomo, Chief Data Officer del Gobierno de España, ha explicado que la Oficina del Dato que preside se creó hace apenas un año como consecuencia de la importancia demostrada de este tipo de información, unidos a la digitalización, en la cadena de valor del estado. Según explica, más allá de la analítica, este organismo viene a trabajar en la modalización de las redes y en la compartición.
En este sentido, Jorge Núñez. CEO de AdQuiver, ha precisado que hay diferentes maneras de explotar los datos de cualquier compañía, desde su propia parte empresarial hasta con otra firma con la que sean competidores o en un ecosistema descentralizado donde no se pierda soberanía pero sí se pueda aprovechar la información de los demás, algo similar a lo que está haciendo Gaia-X.
Así, Dolores Ordóñez, vicepresidenta de Gaia-X, ha señalado que el objetivo último de este organismo es buscar la interoperabilidad de los datos y definir unas reglas del juego "muy claras". No obstante, ha indicado que aún se encuentran en "fase de rodaje", donde su principal misión es transmitir la importancia de apostar por esta vertiente, ya que aún existe bastante desconocimiento.
José Manuel Cabello, director de Innovación de Noray, se ha mostrado de acuerdo con Ordóñez y ha apuntado que, de hecho, el principal reto que afrontan es la concienciación y la formación de los hoteleros, intentar transmitirles la importancia de las arquitecturas de los datos. A esto se suma la confianza, es decir, intentar explicarles los beneficios derivados de la compartición de su información para tomar mejores decisiones.
Mientras, Núñez ha precisado que la gran barrera a superar tiene que ver con pasar de una estructura en la que el cliente está en el centro a otra donde el dato es el foco principal para conseguir escalar. "Hay que estar preparado para lo que viene, ya que el crecimiento es muy rápido y, si no estás alineado, reengancharte va a ser imposible", ha insistido.
El potencial de España
Tanto Ordóñez como Palomo han destacado el papel y el potencial de España en relación a la economía del dato, especialmente en la vertiente sectorial, donde hay una barrera muy alta, pero también una mayor oportunidad de negocio, ya que hay sinergias que aún no han sido explotadas. Aún así, han precisado que se necesita una mayor apuesta en este sentido.
El CIO ha subrayado la posición de este país en relación a las arquitecturas, donde la región "es bastante puntera" y hay empresas nacionales que han liderado la innovación a través de la tecnología.