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La Inteligencia Artificial también es el futuro de la banca

JP Morgan, el principal banco de Estados Unidos, ha hecho una apuesta decidida por la implementación de las nuevas tecnologías en el mundo de las finanzas desde hace tiempo. El presupuesto de 9.600 millones de euros en tecnología del que dispone es una buena prueba de ello. rn

27 febrero, 2018 09:36

Y gran parte de esta abultada cifra se corresponde con los sistemas de aprendizaje automatizado o inteligencia artificial, una inversión creciente en la compañía que, desde la entidad, aseguran que no va encaminada a sustituir a sus empleados, sino a "liberarles" para que se dediquen a tareas de más alto valor añadido.

En medio del debate potenciado por las últimas elecciones presidenciales en Estados Unidos sobre los puestos de trabajo que los robots y los sistema de inteligencia artificial podrían poner en peligro, la entidad bancaria ha lanzado un mensaje en favor de estos sistemas precisamente como potenciadores y mejoradores del trabajo humano. COIN es el sistema de machine learning que desde junio está ayudando a los más de 240.000 empleados de la entidad realizar las tareas más rutinarias.

Interpretación de contratos, lecturas de cláusulas o la revisión de condiciones en general suponían cada año a JP Morgan la utilización de 360.000 horas de trabajo. Ahora, la compañía ha logrado reducir en buena medida parte de ese tiempo a cuestión de segundos mediante la utilización de COIN, cuyas siglas significan ‘Contract Intelligence’. COIN funciona como un sistema de 'cloud privada' y además de acortar el tiempo que se tarda en revisar documentos, ha logrado ayudar a JP Morgan a disminuir su número de errores en el servicio de préstamos. Según los diseñadores del programa, el ojo humano cometía errores en 12.000 nuevos contratos cada año.

La apuesta de JP Morgan se ha avanzado a la media de la banca tradicional, pero genere incertidumbres o no, es en realidad un paso que, al final, todos terminarán dando como un paso más en la natural evolución de una sociedad tecnológica y cada vez más digitalizada. Son muchos los informes y las entidades que auguran enormes despidos ante el avance de las nuevas tecnologías, pero es evidente que nadie puede quedarse atrás en esa imparable revolución. El debate, a estas alturas, no debería ser si digitalización sí o no, si maquinas sí o no, sino, tal y como plantea JP Morgan: qué hacer ahora con mis trabajadores que gozan de más tiempo y menos tareas rutinarias y aburridas.