El 60,99 por ciento de los castellano-manchegos que han comprado un coche este año han preferido que sea diésel, cuya venta, no obstante, se ha resentido, según datos de la consultora MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).

De tal forma que entre enero y agosto las matriculaciones de coches diésel han caído un 13,61 % respecto al mismo periodo del año pasado, con 14.474 unidades matriculadas.

Por el contrario, los de gasolina han disparado sus ventas en un 20,89 % en lo que va de ejercicio y gana terreno entre los conductores castellano-manchegos, al suponer ya un 35,2 % de todas las matriculaciones efectuadas en la región.

Mientras, las ventas de coches movidos con combustibles alternativos tienen un mayor margen de crecimiento, lo que se refleja en el incremento que están experimentando.

Los eléctricos puros se han vendido un 7,14 % más en la región durante este año, aunque sólo para contabilizar 30 matriculaciones.

Más destacado ha sido el incremento experimentado por los vehículos híbridos, que crecen un 81,47 % hasta agosto, suponiendo más del 3,6 % del mercado castellano-manchego.

"Tiene recorrido"

"Estos datos muestran que el diésel tiene todavía recorrido en nuestro mercado, que tradicionalmente ha sido comprador de este combustible", ha apuntado Raúl Morales, director de comunicación de Faconauto, quien ha añadido que "ahora bien, esta tendencia está cambiando, en gran medida porque el precio de la gasolina se está equiparando al del diésel y también porque su imagen ha sufrido duros golpes, algunos de ellos injustos".

Al respecto, ha enfatizado que "los fabricantes siguen innovando e invirtiendo para que los motores diésel sean todavía más eficientes y respetuosos con el medioambiente".

"Sin embargo, el futuro pasa por las motorizaciones menos contaminantes, para que finalmente acaben predominando aquellas tecnologías que permitan muy bajas o incluso cero emisiones", ha concluido.