Hola, amigos. Podéis empezar a escribir sobre la creatividad.

El ganador de la semana pasada, dedicada a las bisagras, ha sido...:

Jorge Alonso Curiel

Ya sin saber lo que hacer, el enamorado le envió una bisagra en un sobre. A ella le hizo tanta gracia, que comenzó a abrirle sus puertas.

Un extraño y audaz correo del protagonista dirigido a su esquiva amada logra establecer un nexo entre lo real y lo simbólico. La bisagra abre el corazón y la intimidad de la mujer, como podría haber abierto una puerta, gracias al humor que ella ve en la acción del enamorado. Ese sobre de contenido surrealista logra hacerse real, consolida el deseo del amante, tiene una consecuencia inesperada y benéfica para su vida. Hay en este micro una defensa latente del humor y de la audacia como fórmulas para conquistar al ser querido, y también ese atrevimiento de la imaginación que sabe alejarse de los caminos trillados para alcanzar la originalidad sin extravagancias. La amada consigue ver en esa bisagra un símbolo definitivo, un sello que le habla, quizás, de la imaginación y del ingenio del pretendiente, y el desesperado gesto de originalidad finalmente abre la puerta tantas veces cerrada. Pero quién de verdad ha sido imaginativo y audaz es el autor del microrrelato: Jorge Alonso Curiel. 

Enhorabuena, Jorge, por el relato, sobresaliente, y por el premio. 

Otros micros pudieron haber ganado: 

Orco

Resignado a su suerte, fue desatornillando las bisagras con las uñas poco a poco. Tenía todo el tiempo del mundo para salir del ataúd.

Pablo Cavero

“Pondría unas bisagras gigantes y evitaría los choques de las placas tectónicas”, dijo en clase el hijo del cerrajero.

Saludos cordiales