El Real Valladolid visita este sábado el Nuevo San Mamés (20,45 horas) con el afán de redimirse tras la injusta derrota del pasado sábado ante el Atlético de Madrid (2-3) y finalizar un 2018 de ensueño con el dulce sabor de boca que dan tres puntos. El colofón perfecto, sin lugar a duda, pero una misión harto complicada dadas las necesidades del adversario, el Athletic Club de Bilbao (decimoctavo con quince puntos) y la intensidad, el calor, que se espera que emane de la grada bilbaína.

No obstante, el conjunto dirigido por Sergio González tiene claro el plan de acción. Sostener la buena imagen fuera de casa y la fiabilidad defensiva que el bloque blanquivioleta viene mostrando a lo largo de esta temporada, así como no contagiarse del fútbol directo que el Athletic Club de Bilbao ha recuperado desde que Gaizka Garitano se hiciese con las riendas del equipo.

La consigna, entonces, es cristalina; prestar mucha atención a las segundas jugadas y a sus “torres” - Raúl García y Aritz Aduriz -, al mismo tiempo que abogar por un fútbol combinativo cuando la situación lo requiera para, así, intentar hacer daño a la zaga vasca, la cual ha ganado firmeza en los últimos envites.

El último partido de este 2018 mágico se presenta emocionante. Sergio González no podrá contar con los lesionados Ivi López, Duje Cop y Luismi, y ha dejado fuera de la convocatoria a Cotán. La lista de 19 convocados la conforman Masip, Yoel, Antoñito, Moyano, Joaquín, Calero, Kiko Olivas, Moi, Nacho, Anuar, Míchel, Borja, Alcaraz, Keko, Toni, Leo Suárez, Verde, Óscar Plano y Enes Ünal.

El partido comenzará a las 20,45 horas y será dirigido por el colegiado Sánchez Martínez.