Cinco días seguidos de nieve sin interrupción. Así está siendo el temporal de nieve que sacude la provincia de León desde el pasado jueves y cuyos estragos se extreman en las zonas más elevadas de la montaña leonesa que, acostumbrada a grandes nevadas, no se esperaba la de este febrero.

La capital está completamente limpia, incluso hace sol, pero a medida que se adentra la provincia, los espesores de nieve aumentan paulatinamente hasta llegar a los casi dos metros de espesor que se han registrado en el pueblo más alto de toda la provincia de León, La Cueta, con 1.442 metros, situada en el municipio leonés de Cabrillanes en la comarca de Babia.

Unos efectos que se agravaron en la tarde de ayer al sufrir dos aludes que bloquearon la carretera LE-3306 que une La Cueta con Vega de Viejos. Además, los accesos por la LE-495 y la LE-491 que unen Piedrafita de Babia con Vega de Viejos obligaba el uso de cadenas.

Falta saber cómo se desarrollará la comarca de Cabrillanes durante lo que resta de semana, ya que la previsión ha situado la cota de nieve entre los 300 y los 600 metros.