La situación que viven los niños del municipio sevillano de El Palmar de Troya pertenecientes a familias seguidoras de la Iglesia Palmariana merece que la Administración tome cartas en el asunto. Tal y como hoy informamos, estos menores están siendo sometidos a un régimen que podría vulnerar derechos fundamentales y condicionar muy negativamente su desarrollo personal.

Tanto la delegación provincial de Educación como el Ayuntamiento ya han alertado a la Fiscalía de Sevilla de situaciones de aislamiento, de absentismo escolar injustificado y de censura en los materiales didácticos por parte de los padres de los chicos. Además, se les impide hablar en clase con el resto de compañeros y jugar con ellos en el patio.

Después de tantos años de la presencia de esta iglesia en El Palmar de Troya, los vecinos veían como normales algunos de esos comportamientos. Pero los escándalos protagonizados por el último papa de esta peculiar iglesia y las denuncias por irregularidades económicas y de abusos sexuales han hecho cambiar la percepción que se tenía de este colectivo.

Por eso, y aunque no existen denuncias, las autoridades educativas y municipales han decidido alertar a la Fiscalía. Lo lógico es que, a la vista de lo que ya conocemos, investigue a fondo el asunto. Y cuanto antes, mejor.