Ese hombre de partido
tan entero se le ve,
que siendo oscuro saca brillo
al quilate no de ley,
pero quilate perfecto
por ser oro del metal
que sin serlo, es electo
con el voto popular.
No hay un puesto más apuesto
ni mejor última moda
para acicalarse el gesto
sobre la sucia memoria.
Su grandeza es lo pequeño
y si ganancia no luce,
no por falta de buen sueldo
que diligente se sube,
siempre irá de "plus en plus"
cerviz alta, voz henchida,
igual que un grano de pus
con la corbata amarilla.
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