Por Miguel Lázaro Caballero, @miguel_lazaro_
No debería ser un tema que se trate como una moda mediática, ni un instrumento político de poder o de captación de votos. El libro Indefenso Ciudadano Español del autor granadino David López Rodríguez, relata en primera persona la gestación de un desahucio desde el principio hasta sus últimas consecuencias.
Llevar una vida normal, con un trabajo normal, en una casa normal parecía ser un lujo cuando nos dijeron a todos que habíamos vivido por encima de nuestras posibilidades, convirtiendo unos derechos recogidos en la Constitución Española del 78, en privilegios que parecían fuera del alcance de la mayoría: trabajo y vivienda.
Tener que volver a la fuerza a casa de tus padres para no quedarte en la calle, dejar de salir con tus amigos a tomarte una simple caña porque no puedes salir de casa, porque te da vergüenza no poder hacer una vida normal, noches sin dormir pensando qué va a pasar mañana, salir a buscar trabajo de lo que sea y llevarte portazo tras portazo... No todas las tragedias aplican a la típica familia de padre, madre, hijos, casa y coche. Si estás solo y quieres hacer tu vida, es imposible salir de ésta sin ayuda, ¿y si no tienes unos padres que te puedan ayudar? ¿Y si las personas de tu círculo no pueden ayudarte?
Durante la fase de promoción de la novela Indefenso Ciudadano Español, a finales del año 2014, varios ejemplares de esta novela contada en primera persona fueron enviadas, o entregadas en mano en algunos casos, a representantes de las principales fuerzas políticas, que a día de hoy han estado discutiendo sin llegar a nada. En ningún caso hubo feedback, una nota de agradecimiento o un acuse de recibo. Sin mencionar que cualquier apoyo publicitario fue denegado, en la ciudad de Granada donde reside el autor, hasta hace poco gobernada por el Partido Popular.
Ahora nos dicen desde Europa que los bancos españoles van a tener que retratarse en base a las cláusulas suelo que han estado impuestas en todos los contratos hipotecarios. ¿Eso va a ser cierto? ¿De verdad van a imponer a los bancos esta medida que haría justicia? Eso quisiera verlo yo, pero si finalmente se consigue, ya habrá llegado tarde. Siempre oímos que los desahucios hay que tratarlos caso por caso, pero… ¿De verdad se trata alguno? Me refiero, si no es por iniciativa, cuenta y riesgo del propio afectado y su insistencia, ¿de verdad se mira caso por caso?
Si hay algo que queda claro en Indefenso Ciudadano Español es la soledad absoluta y el desamparo al que quedan sujetos los que recurren, los que luchan por mantener su vivienda y su trabajo, ya que todo depende de su esfuerzo individual, de quién les asesore y del aguante que tengan a una negativa tras otra. En una ley hipotecaria, no puede tener más peso la deuda que el servicio prestado o adquirido: han de ir a la par. A día de hoy esto sigue sin estar claro, pero la gente sigue firmando y los bancos que conocen la necesidad, siguen poniendo cláusulas que no deben poner.