¿Es Dezcallar particularmente fiable?

Moeh Atitar

Moeh Atitar

Por Víctor Llano

Jorge Dezcallar, responsable del Centro Nacional de Inteligencia en marzo de 2004, asegura en su autobiografía Valió la pena editada por Península, que en curso de la crisis por el 11-M se vio obligado a dimitir por teléfono porque Aznar no le recibió. Hasta el momento Aznar no ha contestado a lo mucho y malo que el diplomático ha dicho sobre su actuación tras la masacre de Madrid, quien sí lo ha hecho sirviéndose de una carta que envió a El País es Federico Trillo. Según el entonces ministro de Defensa, su supuesta dimisión se la tendría que haber comunicado a él y no seguir en su cargo hasta que lo relevara Zapatero. Tras saber de la carta de Trillo, Dezcallar reconoció que presentó la dimisión que finalmente retiró a Aznar y no a su ministro, porque del presidente del Gobierno dependía funcionalmente.

Al ex director del CNI le consta que quien quiere dejar un cargo lo deja. Si había decidido marcharse y Aznar no le recibía, lo normal era llamar a Trillo, advertirle de que abandonaba el CNI y explicarle por qué. Le sobraban motivos si fuera cierto la mitad de lo que ahora cuenta sobre la gestión del Gobierno de Aznar en la investigación del 11-M. Trillo, como él diplomático, lo entendería al instante. Lo que nos cuesta mucho entender es que tras presentar su dimisión la retirara.

¿Por qué no explicó entonces lo que explica ahora? ¿De qué nos sirve saberlo más de once años después? Según Dezcallar, el Gobierno le apartó de la investigación de la peor masacre que sufrimos. Es más, pretendió poner al CNI al servicio de sus estrategias. Sin duda es para dimitir. No sólo dimitir, denunciarlo en un juzgado. ¿Por qué no lo hizo? ¿Por qué al menos no dijo entonces lo que dice ahora? Es lo mínimo que podríamos esperar de un hombre que se considera a sí mismo “particularmente fiable”. Entonces era un servidor público al frente de nuestra Inteligencia, ¿no estaba obligado a denunciar lo que ahora dice que pretendió Aznar?

Con ser mucho y grave lo que han podido leer de las declaraciones de Dezcallar, no es lo que más nos ha sorprendido. Según el diplomático, él no cree que un servicio secreto esté tras el 11-M, lo que sí sabe, no cree, sabe, es que el servicio secreto marroquí no lo está. ¿Por qué de unos cree y de otros sabe? ¿Se lo dijo su amigo Benaissa? ¿También considera “particularmente fiable” al político marroquí?

Por último, por favor fíjense en otra inestimable declaración del primer civil que dirigió el Centro Nacional de Inteligencia. Preguntado por los atentados del 11-M, responde, “no los ordena nadie”. Dezcallar, al que de alguna manera y algún día tendrá que contestar Aznar, no pudo ser más contundente. No lo cree, lo sabe. De acuerdo. ¿Cómo podríamos no creer a un señor que dice de sí mismo que es “particularmente fiable”? Ya sabemos que no fue “nadie”, ¿quién fue?