Por Antonio Joaquín Torreblanca
"¡Feliz 2015!", dijimos el recién inaugurado 1 de enero, con las esperanzas puestas en completar un buen año y con ganas, por qué no decirlo, de ver el mejor periodismo que aquél loco de los tirantes que había invertido más de 5 millones de euros nos había prometido.
Está claro, supongo que todos coincidimos en lo mismo, que el Periodismo es tan necesario como la libertad de expresión y ésta, a su vez, tan necesaria como el Periodismo, porque van de la mano, no podrían existir la una sin el otro. Por ello, aunque los de ahí arriba se esfuercen en coartar la voz de la ciudadanía, en decirles qué tienen que decir y cuándo, en intentar controlar todo lo que hacen y lo que creen que se les va de sus manos, no podrán evitar que los medios independientes (de esos que casi ya no quedan) luchen con todas sus ganas y más que nunca por defender nuestros derechos. Luchen por conseguir un Periodismo independiente sin tener que rendir cuentas a nadie, ni a políticos ni a grandes empresas.
El ESPAÑOL se suma a partir de ahora a la lista de medios de comunicación que luchan contra el poder establecido y que defienden a los ciudadanos frente a la codicia desenfrenada de Ratos y Puyoles. Más en este año en el que el estafermo, mal llamado Rajoy, pretende revalidar la victoria electoral de 2011, donde el PSOE amolda su programa a la sirena que mejor suena, y con Ciudadanos y Podemos al acecho, amenazando a los partidos tradicionales con llevarse un trozo del pastel.
Un año clave para toda una nación que espera los mejores reportajes, análisis de datos y contrastadas informaciones de un periódico tan esperado como EL ESPAÑOL.
Por todo ello y para construir un país mejor, todos y cada uno de los integrantes de España tenemos la obligación de exigir un Periodismo independiente, veraz, valiente, analítico, fiero, raudo, veloz... Oigan, ¡como un león! Aquel "¡Feliz 2015!" que soñamos hace poco más de 10 meses, por fin se hará realidad. De hecho, ya es realidad.
Bienvenido León, bienvenido EL ESPAÑOL. ¡A cazar!