urgencia

urgencia

Tecnología

Animación suspendida: La técnica médica para salvar personas entre la vida y la muerte

27 marzo, 2014 22:19

Salvar vidas es algo complicado, y la cosa empeora si resulta que estás intentando salvar a alguien con un cuchillo clavado o con una bala entre pecho y espalda. Ahí solo hay una cosa a tener en cuenta, una única e importantísima cosa: El tiempo. Si conseguimos actuar lo suficientemente rápido la cosa puede ir bien, pero ahora han añadido un factor más, lo llaman animación suspendida, algo así como enfríar un cuerpo como técnica de emergencia para ganarle la partida al tiempo.

Comprar tiempo, salvar vidas

tiempo

tiempo

Así es como llaman a su técnica los cirujanos del Hospital UPMC Presbyterian de Pittsburgh, en Pennsylvania. Según comentan es como “suspender la vida“, un método de prevención de emergencia para conseguir reanimar a los pacientes. Aunque no les gusta llamarlo animación suspendida, pues suena un poco como ciencia-ficción, y es algo muy real.

Esencialmente, esta técnica implica la sustitución de toda la sangre del paciente por una solución salina fría. Y ahí esta la clave: el frío. Ya son bastante conocidos los beneficios de la refrigeración o hipotermia inducida, un método que hace que las células corporales detengan casi completamente su actividad, haciendo que necesiten menos oxígeno porque todas sus reacciones químicas van más lentas. Esto implica que si normalmente nuestro cerebro solo podría sobrevivir 5 minutos sin oxígeno, con este método se podría aguantar hasta media hora en ese estado, pues las células necesitan menos oxígeno que consumir.

Un método conocido con otra una forma diferente de aplicarlo

hipotermia_inducida

hipotermia_inducida

Actualmente el método de la hipotermia inducida ya se usa antes de operaciones de corazón o cerebro, donde la temperatura del paciente se rebajamediante bolsas de hielo consiguiendo que su sangre circule por un sistema externo. Esto da 45 minutos de tiempo para realizar la cirugía, tiempo en el que el flujo sanguíneo se detiene. Sin embargo ese método necesita tiempo planificación y preparación, cosa impensable en situaciones de urgencia como una herida de bala o de cuchillo.

En situaciones como estas hay que actuar rápido, y normalmente el corazón ha dejado de latir por una pérdida de sangre importante, por lo que tan solo se dispone de unos minutos. Ahí entra en juego la animación suspendida, una técnica demostrara en 2002 en cerdos por Hasan Alam y sus colegas en el University of Michigan Hospital. Dichos animales fueron sedados y se les provocó una hemorragia masiva para imitar las heridas de bala. Su sangre se drenó y se sustituyó por una solución salina fría, llevando su cuerpo a 10ºC de temperatura (normalmente la temperatura corporal es de alrededor de 37ºC). Después se trataron sus heridas y se les subió la temperatura corporal gradualmente mientras se les devolvia la sangre al cuerpo. Normalmente su corazón volvía al estado normal, pero en alguna ocasión les hizo falta un empujoncito. No hubo ningun efecto físico ni psíquico tras el método.

El plan es probar el método en seres humanos pronto, en aquellas situaciones donde el paciente ha perdido alrededor de un 50% de sangre por una herida abierta, casos que se pueden llegar a ver una vez por mes en algunos hospitales y cuya supervivencia es del 7% de probabilidades.

Esperemos que con este método se consigan salvar cada vez más vidas.

Vía | New Scientist.