Con el 60% de la población mundial inmunizada frente al coronavirus, la demanda de antígenos contra la Covid-19 ha caído. Y con ella, los ingresos de las farmacéuticas Pfizer y Moderna por sus vacunas. 

En concreto, en el primer semestre de 2023, las ventas de las vacunas contra la Covid-19 de Pfizer y Moderna se han desplomado hasta un 80%. En el caso de la primera, los ingresos por el antígeno han sido de 4.552 millones de dólares en los primeros seis meses de este año, frente a los 22.075 millones alcanzados en el mismo periodo de 2022. Es decir, un 79% menos.

De esta manera, Comirnaty (nombre comercial de la vacuna de Pfizer) deja de ser el medicamento más vendido del mundo, un título que le arrebató a Humira en 2021 y 2022. En estos dos ejercicios, los ingresos por este antígeno superaron los 36.000 millones de dólares, rompiendo así los récords de ventas anuales del mercado farmacéutico.

[Bruselas acuerda con Pfizer reducir la entrega de vacunas Covid, pero con penalización]

Por su parte, la vacuna de Moderna ha generado unos ingresos por valor de 2.100 millones de dólares en el primer semestre de 2023. Entre enero y junio del ejercicio anterior, la compañía alcanzó los 10.500 millones de dólares por las ventas de su antígeno, cuyo nombre comercial es Spikevax. Supone una caída del 80%. 

A pesar de haber sido las vacunas más utilizadas, el negocio parece llegar a su fin al igual que la emergencia de salud pública global por la Covid-19, decretado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el pasado mes de mayo.

[La OMS declara el fin de la emergencia de salud pública global por la Covid-19 tres años después]

A pesar de que la OMS declarase el final de la pandemia, lo cierto es que su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió de que "este virus está aquí para quedarse. Aún está matando, y está mutando. Todavía existe el riesgo de que emerjan nuevas variantes y causen nuevos aumentos en el número de casos y de muertes".

De hecho, una nueva variante ha aparecido en las últimas semanas y ya tiene una presencia importante en nueve países. Entre ellos está España, donde se ha detectado en el 34% de las muestras secuenciadas. En Dinamarca, Francia, Islandia, Irlanda y Portugal supera el 40%.

Campaña de vacunación

Aunque la demanda de vacunas contra la Covid-19 haya caído drásticamente, lo cierto es que los países siguen apostando por las dosis de refuerzo. En España, el Ministerio de Sanidad ha recomendado la vacunación frente al coronavirus para este otoño, coincidiendo un año más (ya se hizo en 2022) con la campaña de inmunización frente a la gripe

De nuevo, el departamento que dirige José Miñones recomienda la vacunación en grupos de riesgo: mayores de 60 años, personas con enfermedades crónicas o embarazadas, entre otros. 

Para dar respuesta a estas campañas de refuerzo, las compañías farmacéuticas continúan trabajando en vacunas actualizadas y adaptadas a las nuevas variantes. Es el caso de Moderna, que hace unos días presentaba resultados positivos de su antígeno actualizado para la temporada de vacunación de este otoño. 

Esta nueva vacuna está aún pendiente de autorización por parte de la Agencia Europea del Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) y del órgano regulador de Estados Unidos (conocido como FDA), pero la compañía asegura que "estará lista para la vacunación de otoño con un suministro mundial suficiente".