La vela de ayer en el BBVA fue bastante contundente al subir más de un 5% con un volumen nada despreciable, aunque mirando un gráfico queda minimizado al compararlo con el del vencimiento del pasado viernes. 

Con ello, se ha dejado una vela envolvente bastante clara que va a tener que ser ratificada en la sesión de hoy para poder ver una interesante reacción alcista en las próximas sesiones. 

Sin embargo, no podemos olvidar la zona de los 2,38 euros. Esos son los mínimos de agosto y de la primera semana de septiembre por lo que se presentan ahora como la primera de muchas resistencias que tiene el valor que recuperar para ver un cambio en su comportamiento. 

Por esa razón hay que estar muy atentos a lo que ocurra en la sesión de hoy porque realmente ya hemos llegado a esos 2,38 euros y la reacción alcista se ha frenado. 

De hecho, entre este nivel y los que vimos en los mínimos de marzo, abril y mayo en la zona de los 2,45 euros debería agotarse la actual reacción alcista si realmente lo que estamos viendo es una reacción motivada por unos niveles extraordinariamente altos de sobreventa que es realmente lo que sospecho. 

Por lo tanto, mientras que no veamos cierres sostenidos por encima de los 2,45 euros no debemos creernos que estemos asistiendo a un proceso de giro en el medio y largo plazo. 

Más que nada porque precisamente esos 2,45 euros fueron los mínimos que marcó el BBVA en marzo de 2009 en base cierres si vemos un gráfico del precio ajustado por dividendos. 

Así que dicho nivel es el que si presenta como juez que permitirá el cambio de tendencia o no en el medio y largo plazo.