Invertir en baterías y abrirse paso en el sector de los centros de datos se está convirtiendo en un salvavidas para las empresas renovables españolas que en 2024 vivieron su annus horribilus, al menos en su cotización bursátil, con pérdidas que alcanzaron los 11.700 millones de euros.
A día de hoy, y pese a la criba que ha sufrido el sector con algunas empresas que siguen en la cuerda floja, hay otras que han sabido cambiar el guión a tiempo y conseguir una revalorización meteórica.
Es el caso de Solaria, que en seis meses su valor en bolsa ha subido un 80%, hasta los 12,42 euros la acción, seguida de Grenergy, con un 62% de mejora hasta los 66,70 euros y de Acciona Energía, que sube un 34,29% hasta los 22,52 euros.
Los analistas de Bank of America (BofA) resaltan de Solaria "el potencial de crecimiento de los centros de datos, donde es más probable que se cuente con la incorporación de un socio industrial y con avances tangibles en renovables".
Las acciones de la empresa española de energía renovable se están recuperando, y BofA espera que esta dinámica positiva continúe.
En su Capital Market Day del pasado martes, 30 de septiembre, el consejero delegado de la compañía, Arturo Díaz Tejeiro, señaló que incorporará un inversor especializado en centros de datos al consejo, y que continuará con la construcción de nuevos proyectos de energía renovable, aunque diversificando en varios países.
Y además, espera ser "el próximo gran actor de baterías estacionarias en Europa, con 1,4 GWh en marcha", señaló. El apoyo recibido en el mercado bursátil también tiene que ver con la aprobación ambiental para instalar 780 megavatios/hora (MWh) de baterías en su complejo solar de Garoña (710 MW).
Hibridación de Grenergy
La española Grenergy ha sido una de las pioneras en apostar por las baterías y los sistemas hibridados de renovables con almacenamiento estacionario. Según la última presentación de resultados, la inversión (CAPEX) fue destinada principalmente a proyectos de hibridación fotovoltaica con almacenamiento (PV+BESS).
En concreto, ascendía a 421 millones de euros al cierre del primer semestre de 2025, lo que supone un crecimiento del 277% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Su objetivo es llegar a los 3.500 millones de euros de inversión en 2027.
Grenergy tiene un plan muy ambicioso de baterías para el proyecto Oasis de Atacama (Chile), con el objetivo de consolidarse como líder en almacenamiento energético en Latinoamérica para 2027.
El megaproyecto Oasis de Atacama contempla la instalación de hasta 11 GWh de almacenamiento con baterías de ion-litio, repartido en siete fases, junto a 2 GW de generación solar fotovoltaica.
Baterías para eólica
Acciona Energía está impulsando la hibridación de renovables con baterías a través de una cartera de proyectos que combinan tecnología eólica, solar y almacenamiento, tanto en España como a nivel internacional.
La compañía ya ha completado instalaciones híbridas en España, como la planta fotovoltaica en el emplazamiento del parque eólico Peralejo (Cuenca) y el proyecto Escepar (solares y eólicos), junto a la planta Bolarque.
Además, promueve hibridaciones como la fotovoltaica Los Morrones (Granada). En conjunto, Acciona Energía cuenta con un pipeline de 1,8 GW en proyectos de hibridación, con una cartera de almacenamiento de 2,4 GW, de los que 400 MW estaban previstos para construir en EEUU.
Por motivos de entorno geopolítico y ajustes estratégicos, en 2025 la empresa paralizó temporalmente dos grandes proyectos de baterías previstos en Texas (400 MW/800 MWh), aunque mantiene planes de retomar estas iniciativas dependiendo de la evolución de los costes y el contexto regulatorio.
No son las únicas. Por ejemplo, Iberdrola, que ha sido la primera y hasta hace poco, la única, en conectar a la red una batería (la de Abadiño en Vizcaya de 3,5 MWh), ha anunciado una inversión de 1.500 millones de euros dedicada exclusivamente a almacenamiento energético antes de 2026, con el objetivo de superar los 120 GWh de capacidad de almacenamiento operativa a 2030.
Además, está integrando sistemas de baterías en instalaciones solares y eólicas, y ha desarrollado comunidades solares con almacenamiento en Extremadura en 2025.
Y el plan estratégico de Endesa para 2027 contempla más de 4 GW de proyectos de baterías en fases de desarrollo – la mayoría como proyectos hibridados con renovables o también en modalidad stand-alone, directamente conectados a la red eléctrica.
RIC Energy también está apostando de forma decidida por el almacenamiento energético con baterías, consolidándose como uno de los actores relevantes dentro del sector renovable español. Se adjudicó 29 millones de euros en la convocatoria del PERTE de almacenamiento energético, y su apuesta es claramente por las stand-alone.
En definitiva, el interés inversor en baterías es muy elevado, con expectativas de alcanzar entre 4.000 y 5.000 MW en operación para 2029, y rentabilidades atractivas incluso en ausencia de incentivos directos.
Sin embargo, la regulación y el modelo de ingresos aún pendientes son claves para la materialización masiva del pipeline presentado.
