La plantilla de CaixaBank se encuentra inmersa estos días en pleno proceso de adhesión voluntaria al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con las condiciones que la dirección y los sindicatos acordaron el pasado 1 de julio.

El plazo para la adscripción voluntaria comenzó el pasado viernes, 16 de julio, y dura dos semanas, pero la dirección ha recibido en estos cuatro primeros días ya 5.287 peticiones para apuntarse al ERE, según ha podido saber Invertia. Esta cifra supone más del 80% del total de salidas previstas en el proceso, que son 6.452.

Dirección y sindicatos acordaron que la adscripción a este proceso se realizaría en cinco fases en función de cómo se fueran cubriendo las vacantes. En la primera, que es en la que está inmerso el banco actualmente, se reciben las solicitudes de forma generalizada y más adelante se irán ajustando los excedentes.

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