La famosa crema Nivea que arrancó su andadura con la icónica lata azul es uno de los productos cosméticos más vendidos del mundo, consiguiendo comercializar más de 100 millones de estas latas de forma anual. La compañía alemana que la produce (Beiersdorf) cumple este año su 110 aniversario con una marca consolidada que no ha estado exenta de polémicas.

Antes de entrar en la parte más sensible de la marca, viene bien recordar los datos económicos que avalan su imperio en el sector cosmético. La matriz alemana ha aumentado su facturación en un 12,3% en el primer semestre del ejercicio de 2021 con respecto al mismo período del año pasado, alcanzando 3.874 millones de euros.

Su beneficio después de impuestos fue de 404 millones, escalando un 38,6% en base al primer semestre de 2020. Mientras que Europa, el primer mercado para el grupo por facturación, alcanzó 1.489 millones de euros, incrementando sus ventas orgánicas un 9,1% en el primer semestre.

Si nos referimos al mercado español, las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil correspondientes a 2019 reflejan una ligera caída del 2% en su facturación, hasta los 148,2 millones de euros. Lo mismo ocurre con su beneficio neto, que cae un 0,3% hasta los 16,32 millones de euros.

Desde 1911

Pero para llegar hasta donde ha llegado, el camino no ha sido tan fácil. Su historia arranca en 1911 cuando el doctor en química Isaac Lifschütz inventó el emulsionante Eucerit, capaz de producir una mezcla estable de agua y aceite. El farmacéutico y empresario Óscar Troplowitz supo reconocer su potencial quien, junto al dermatólogo y catedrático Paul Gerson Unna, desarrolló la famosa crema Nivea.

Era el año 1914 y los transatlánticos y primeros hidroaviones conectaban países. La recién fundada Beiersdorf aprovecha esta oportunidad y solo tres años después de su lanzamiento, Nivea ya estaba presente en todos los continentes.

Desde entonces empieza a lanzar productos que eran toda una novedad en el mercado de la cosmética como los primeros protectores solares o líneas de cuidado facial exclusiva para hombres.

Fuente: web corporativa de Nivea

En la historia de Nivea destacan dos datos curiosos. El primero es que para crear su nombre decidieron emplear la palabra latina nix, nivis que significa blanca nieve. Esto se debe a que la crema es blanca como la nieve. Y el segundo es que la primera lata azul ve la luz en 1925.

Además, no es casualidad que su crema siga vendiéndose en el formato lata, como en sus inicios. El envase en lata permite que los ingredientes de la crema se mantengan inalterables y del mismo modo es un signo de su propio producto, porque la lata azul se puede usar al acabar la crema de su interior.

Balón de playa

Otro de los símbolos que distingue a la compañía es su famoso balón de playa. La historia de este balón azul oscuro con la firma de Nivea en letras blancas arrancó en Alemania a mediados de los años treinta, como una interpretación en tres dimensiones de la conocida lata de crema. Mientras que el anuncio de Nivea de 1965 consistía en un minuto de imágenes de personas de todas las edades disfrutando de este sencillo pero singular balón de playa publicitario.

Fuente: web corporativa de Nivea

Y su fama y popularidad se ha consolidado con el paso de los años. En los últimos 40 años se han producido más de 20 millones de pelotas, que tampoco son tantos teniendo en cuenta que, al menos en España, todo el mundo parece haber tenido uno.

Polémicas 

Por otra parte, tantos años de historia han dado para mucho y como todas las compañías han tenido también sus momentos de polémicas. En el año 2017, Nivea fue acusada de racista por una campaña publicitaria en donde aparecía una mujer y el eslogan White is purity (El blanco es pureza). 

La frase "Mantenla limpia, mantenla brillante, no dejes que nada la arruine" provocó en su día una ola de críticas en las redes sociales, que no tardaron en aludir a las connotaciones racistas del mensaje, al que también calificaron de "insensible y discriminatorio".

Debido al revuelo ocasionado, Beiersdorf se vio obligada a cancelar la campaña y pedir disculpas en un comunicado que decía: "Lamentamos profundamente que cualquier persona pueda haberse ofendido por esta publicación en concreto. Tras darnos cuenta de que el mensaje es engañoso, fue retirado de inmediato".

Otra conocida polémica vino de la mano de un desafortunado comentario que desencadenó en 2019 una crisis interna y externa. En su día, la agencia FCB le había propuesto a un alto directivo de Nivea hacer un campaña publicitaria en la que dos hombres se dieran la mano. Ante esta circunstancia, un alto directivo de la compañía, en una conferencia telefónica, habría rechazado que se llevara a cabo en esos términos y condiciones porque ellos "no hacen cosas para gais", según una información del diario británico The Times.

Esta situación llevó a FCB a no renovar el contrato que tenía con la compañía. Así lo anunciaba a su equipo el CEO de la empresa publicitaria en un comunicado.

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