A LOS LEONES: Irene Cano (Facebook) y José Creuheras (Planeta)

Empresas EL MERODEADOR

1 octubre, 2018 00:53

La pésima gestión de los datos personales vuelve a jugar una mala pasada a Irene Cano y a Facebook

Facebook no sale de la espiral negativa en la que lleva sumergida en los últimos meses. Y las malas decisiones vuelven a lastrar a la directora general en España, Irene Cano. Los datos personales de los usuarios han vuelto a ser la kryptonita de la compañía dirigida por Mark Zuckerberg.

Primero fue el escándalo de Cambridge Analytica el que hizo saltar por los aires la sensación de empresa que cuidaba a sus usuarios y esta semana ha quedado demostrado que a Facebook le hace falta una profunda reestructuración si de verdad quiere ser la que fue hace algún año o si quiere dedicarse a temas serios, como la banca, que requieren de mucha más responsabilidad.

La compañía comunicó un ataque lo que ha provocado que más de 50 millones de usuarios hayan sido expuestos al robo de sus datos personales. Esta brecha se produjo a principio de esta semana aunque, según indica la red social, estos problemas ya han sido resueltos y están siendo investigados.

Dos nubarrones demasiado grandes que están lastrando a Facebook. Si hace poco más de un mes se conocía que ha perdido más de un 20% de usuarios, este nuevo agujero en la seguridad podría provocar un descalabro. De momento, los inversores han vuelto a dar la espalda a la red social y sus acciones se desplomaban en la jornada del viernes, un nuevo revés que se suma a muchos otros en los últimos tres meses.

Las desgracias nunca vienen solas y, además, Facebook perdía a dos de sus buques insignia. Los dos creadores de Instagram dejaban su despacho debido a las diferencias con Mark Zuckerberg y uno de los cofundadores de WhatsApp demolía a la red social en una entrevista con Forbes. En definitiva, el dueño de Facebook debe replantearse si jugar libremente y a lo loco con algo tan importante como es la privacidad de los usuarios merece la pena. Por ahora, el dueño de la red social dice una cosa, pero lo cierto y verdad es que los hechos son otros.

El humorista John Oliver destrozaba recientemente a la compañía en un segmento de Last Week Tonight y recordaba que su lema original era 'muévete deprisa y rompe cosas'. Quizá el mismo Zuckerberg que decía que si no rompía suficientes cosas es que no se estaba moviendo lo bastante rápido debería pensar en la frase que popularizo John Derek en Llamad a cualquier puerta: "Vive deprisa, muere joven, deja un bonito cadáver".

José Creuheras, culpable del hundimiento de Atresmedia (y de los Lara) en Bolsa

Tres años y medio como presidente de Atresmedia y 734 millones de euros menos en Bolsa para el grupo audiovisual. Éste es el triste balance de José Creuheras después coger los mandos de Planeta y de su grupo audiovisual, tras la muerte de José Manuel Lara Bosch en enero de 2015. Un periodo en el que el líder de la principal editorial en castellano se ha dedicado más a hacer política en los despachos monclovitas que en centrarse en generar valor para su compañía y para sus dueños: la familia Lara.

El grupo Atresmedia ha perdido 1.761 millones de euros de capitalización bursátil durante la gestión de Creuheras. Y lo peor es que el directivo no parece encontrar soluciones para la actual situación de una compañía que ve cómo se reducen sus ingresos publicitarios tras perder la guerra con los nuevos players audiovisuales como Netflix, Amazon o HBO. Es probable que este año, por primera vez desde 2013, ingresen menos dinero por publicidad, una situación que amenaza con convertirse en crónica en los próximos años, sin que Creuheras presente un plan de diversificación creíble y coherente.  

Una gestión que ha afectado duramente al patrimonio de la familia Lara. A través de la sociedad Pasa Cartera y Planeta de Agostini tiene el 41,7% de la compañía. Esto significa que hasta el desembarco de Creuheras, la participación del editor de libros en Atresmedia estaba valorada en 1.277 millones. Según la cotización del cierre del mercado de la pasada semana, el paquete representa solo 542 millones de euros, una minusvalía de 734 millones durante la gestión del actual presidente.

Unos números que parece que hacen reaccionar a la familia Lara, o al menos a las hermanas del fallecido Lara Bosch, que históricamente le han apoyado y que fueron claves en su decisión de apartar a José Manuel Lara García, hijo de Lara Bosch, hasta el momento consejero delegado de Planeta y consejero de Atresmedia.

Una guerra familiar que podría pasarle factura, ya que cada vez existe más convencimiento de que Creuheras es el culpable de la pérdida de patrimonio de la familia Lara, que prepara el cierre de su patrimonial con pérdidas contables de 400 millones de euros. De hecho, por primera vez en su historia las cuatro ramas de la familia están representadas en el consejo de Planeta y los hijos del también fallecido Fernando Lara Bosch, han decidido establecer un control más directo de la gestión de Creuheras. La guerra está abierta.