La inflación vuelve a dar malas noticias este verano. Según los datos adelantados del Instituto Nacional de Estadística (INE), los precios han vuelto a subir en agosto, después del aumento registrado en julio. El incremento del Índice de Precios al Consumo (IPC) ha sido del 2,6% respecto al mismo periodo del año pasado.

De esta manera, la inflación registra dos meses consecutivos de aumentos (en julio se elevó hasta el 2,3%), algo que no ocurría desde principios de este 2023. 

Según el INE, la principal razón del incremento de los precios en agosto (que todavía se tiene que confirmar dentro de unas semanas) es la subida de los precios de los carburantes que se ha ido registrando este verano. Y, "en menor medida, de los combustibles líquidos frente a las bajadas registradas en agosto de 2022", apunta el órgano su periódico comunicado. 

Los precios de los carburantes han protagonizado un peculiar rally alcista durante este verano. Tanto la gasolina como el gasóleo han encadenado siete subidas consecutivas, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea

De esta manera, la gasolina ya se sitúa en los 1,709 euros por litro, su valor máximo en lo que va de 2023. Mientras, el gasóleo alcanza los 1,601 euros el litro.

Subidas  

Así, desde inicios de julio, el litro de gasolina acumula un incremento en su precio del 7,34%, mientras que el de gasóleo suma un encarecimiento del 11,3%.

El INE también señala que, pese a todo, la inflación se ha atenuado por el comportamiento de los precios de la electricidad. "Este mes aumentan pero menos que en agosto de 2022". 

En cambio, según la información del IPC, la inflación subyacente (que incluye en su análisis los precios de la energía y de los alimentos no elaborados) se ha reducido ligeramente. Concretamente una décima, del 6,2% anual de julio al 6,1% de este mes de agosto.