Tokio, 29 jul (EFECOM).- El Banco de Japón (BOJ) inició hoy su reunión de política monetaria en la que se espera que la entidad reafirme su compromiso de mantener los tipos de interés ultra bajos para impulsar la inflación y al mismo tiempo evitar un auge del yen.

La junta de política monetaria del banco central nipón analizará la marcha de la economía nacional, que se ha visto afectada por la desaceleración de China y de Estados Unidos y por la incertidumbre derivada del conflicto comercial entre ambos, así como la débil evolución del índice de precios de consumo.

Con el objetivo de alcanzar una inflación del 2 por ciento anual, la entidad ya aplica tipos de interés de referencia negativos a corto plazo para los depósitos bancarios y sitúa el rendimiento del bono japonés a 10 años en torno al 0 por ciento, acciones que se suman a su amplia estrategia de flexibilización monetaria.

El pasado abril, el banco central nipón se comprometió a mantener sus tipos "extremadamente bajos" hasta al menos mediados de 2020, en vistas a que el ritmo de incremento de precios de consumo continúa por debajo de lo esperado.

Los analistas prevén que el BOJ reafirmará este compromiso o incluso lo extenderá hasta finales de 2020, aunque algunos expertos advierten de que la entidad se podría ver obligada a emprender medidas aún más ambiciosas, en línea con las decisiones que se esperan de otras entidades de política monetaria de referencia.

El Banco Central Europeo (BCE) apuntó la semana pasada su intención de aplicar nuevas medidas de estímulo, entre las cuales podría haber recortes adicionales de tipos, mientras se esperan medidas similares por parte de la Reserva Federal Estadounidense (Fed) en la reunión que esta entidad celebrará entre el martes y el miércoles.

Un posible recorte adicional de tipos por parte de la Fed podría desencadenar un auge del yen frente al dólar, lo que castigaría a los grandes exportadores japoneses.