El Ayuntamiento de Lisboa presentó hoy un nuevo programa de alquiler accesible que reducirá casi a la mitad los precios máximos en la ciudad fijados por el Gobierno del socialista António Costa, en vigor desde el pasado lunes.

Ha sido el alcalde de Lisboa, el socialista Fernando Medina, quien ha presentado el proyecto PRA (por sus siglas en portugués: "Programa de Renda Acessível"), que se prevé integre a al menos 6.000 casas con precios más bajos de los que actualmente ofrece el mercado.

Con esta iniciativa, un estudio de un único ambiente en Lisboa tendrá un coste de entre 150 y 400 euros, lejos del límite de 600 euros que proponía el Ejecutivo central.

Mientras, los pisos con una habitación costarán entre hasta 500 euros, los de dos tendrán un tope de 600 euros y las casas con tres o más habitaciones no superarán los 800 euros.

Son bajadas sustantivas con respecto a los precios fijados en el programa de alquiler accesible del Gobierno portugués, liderado por el también socialista António Costa, que entró en vigor este lunes.

En este programa, Lisboa es la única ciudad que se encuentra en el escalón de precios más alto, que determina unos alquileres máximos de 600 euros en los estudios de un ambiente, de 900 en los pisos de una habitación, de 1.150 en los de dos, de 1.375 en los de tres, de 1.550 en los de cuatro y de 1.700 en las de cinco.

En Portugal, donde el salario mínimo se sitúa en los 600 euros, el programa gubernamental no fue muy bien recibido ni en los barrios más afectados por los altos precios del alquiler ni tampoco por los propietarios.

En el proyecto del consistorio lisboeta, los candidatos, si se presentan de forma individual, deberán tener un ingreso bruto anual de entre 8.400 -el mínimo nacional- y 35.000 euros.

En el caso de que sean dos personas el máximo serán los 45.000 euros y si son más de dos, el límite se establecerá en esos 45.000 más 5.000 adicionales por cada persona dependiente.

Las candidaturas deberán tener en cuenta también el número de personas para pedir un piso con más o menos habitaciones, por lo que una persona sola tendrá derecho a un estudio de un único ambiente o a un piso de una habitación, mientras que dos personas podrán acceder a estos dos tipos de casas y a una con dos cuartos.

Si son tres o cuatro personas, el máximo serán tres habitaciones y para las familias numerosas (cinco o más miembros), el mínimo serán tres y el máximo cinco.

El valor exacto del alquiler dependerá de los ingresos netos de las familias candidatas, de forma que el precio a pagar por la casa no puede representar más de un 30 % de lo que cobren después de impuestos.