Consultemos el dato que consultemos, no hay duda de que 2023 estaba llamado a ser el año del despegue definitivo de la digitalización en el seno del sector público. Un momento mágico, de esos que suceden una vez cada generación, en el que nuestra Administración tenía la oportunidad de ponerse al día con las necesidades y exigencias de una sociedad que demanda, de su burocracia, un trato similar al que ya recibe por parte de sus marcas y empresas favoritas.

En ese sentido, el despliegue de la Agenda España Digital 2026 había multiplicado por siete la inversión pública en transformación digital para el período 2021-2023, en comparación con los tres años anteriores. ¿Cómo se traslada esto en números contantes y sonantes? Este curso, la inversión en tecnología en la Administración General del Estado aumentó un 12%, alcanzando los 2.334 millones de euros. El Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia constituye un 35% de esta inversión total. 

Unos números que también se notan en la industria digital, que calaban en el mercado. Según Adjudicaciones TIC, la Administración Pública había incrementado su inversión en tecnología en un 42% en los primeros cinco meses de 2023 en comparación con el mismo período de 2022. 

Hablo en pasado en muchos de los casos porque, al menos en lo referente a la Administración nacional, este esfuerzo se ha visto interrumpido de forma súbita por la convocatoria de elecciones y la incertidumbre generalizada que reina sobre los designios de nuestro país. Recordemos que, desde la convocatoria de comicios adelantados por parte de Pedro Sánchez en verano, España ha vivido cinco meses de interinidad de su poder ejecutivo. Algo que, como imaginará nuestro querido lector, no es especialmente halagüeño.

El último en alzar la voz sobre el asunto, esta misma semana, ha sido José Manuel Petisco, director general de NetApp Iberia, a pregunta de D+I - EL ESPAÑOL: "Hemos notado un parón en la inversión del gobierno central según avanzaba el año, salvo algunas cosas que se adjudicaron por el procedimiento de urgencia. Y eso que veníamos para hacer un año récord, estaba siendo un ejercicio muy positivo. Sin embargo, necesitamos que el gobierno vuelva a estar en funcionamiento para retomar la marcha, todo el Ejecutivo, incluso en niveles como las subdirecciones generales que también tienen mucho que decir en este tipo de compras".

¿Seremos capaces de retomar ese camino de récord al que alude Petisco? ¿Conseguiremos ejecutar las ingentes cantidades que los fondos europeos, muchos con plazos de ejecución tan inmediatos como 2026, destinan a la digitalización de nuestra Administración? La respuesta, como suele decirse, la dará el paso del tiempo. Y aquí estaremos para contarlo.