Wearlumb, a través del uso de las nuevas tecnologías, facilita una monitorización in situ y de forma continua.

Wearlumb, a través del uso de las nuevas tecnologías, facilita una monitorización in situ y de forma continua.

Innovadores

Una camiseta inteligente que corrige la postura y evita lumbalgias

Es una prenda elástica y adaptable con sensores que capturan el movimiento y un software inteligente analiza las posturas en tiempo real

25 febrero, 2019 12:46

Un wearable, en forma de camiseta, que evalúa los riesgos de posturas incorrectas en el ámbito laboral, combatiendo la fatiga e implantando medidas correctoras de la postura de acuerdo con estudios ergonómicos para cada actividad. Se trata de una camiseta elástica y adaptable a diferentes morfologías, dotada de sensores de captura de movimiento, conectados a un sistema experto que analiza la postura y sirve de apoyo a la toma decisiones, corrigiendo la postura del usuario.

Wearlumb, a través del uso de las nuevas tecnologías, facilita una monitorización in situ y de forma continua, lo que permite una detección precoz del problema y se consigue el objetivo de mejorar la calidad de vida de los usuarios, así como la prevención de recaídas. El sistema realiza una monitorización en tiempo real, y está conectado vía bluetooth con un software inteligente que, en su caso, permite corregir la postura de una manera visual, muy efectiva y fácil de utilizar.

“Son muy pocas las aplicaciones que integran las nuevas tecnologías portátiles en el ámbito laboral y que sean capaces de detectar en tiempo real una postura deficiente y que, al mismo tiempo, informe sobre la adopción de medidas preventivas o correctivas al respecto”, explica Santi Ristol Jorba, director del Centro de Competencias de Movilidad de Worldline, que la ha desarrollado con la colaboración de SGS y Eurecat, y con el soporte de ACCIÓ.

A pesar de que este tipo de problemas es muy general, apenas existen sistemas tecnológicos avanzados que den apoyo a la evaluación de los riesgos derivados de “una mala postura” y su prevención, y casi siempre están limitados al ámbito experimental, de investigación o de la rehabilitación.

Según diferentes estudios, las enfermedades y accidentes derivados de factores músculo-esqueléticos se están convirtiendo en el principal problema de los trabajadores y se prevé que su incidencia vaya en aumento. El 38,5% de los accidentes laborales registrados en 2014, un total de 197.381, tuvieron su origen en un sobre esfuerzo. Además, el 71,1% de las enfermedades profesionales se deben a Trastornos Músculo-Esqueléticos (TME), entre los que la lumbalgia es la más habitual. Su incidencia laboral es más que relevante, si se tiene en cuenta que del 80% de la población que padece un TME, un 20% tiene dolencias a lo largo de más de tres meses.