No son excluyentes. De hecho, si rebuscáramos un poco, encontraríamos ejemplos de los dos tipos de estrategias en ambos territorios. Pero la coincidencia temporal en la convocatoria de dos líneas de ayudas por parte de las diputaciones de Cádiz (Andalucía) y de Cáceres (Extremadura) que buscan lo mismo a través de dos caminos diferentes nos sirve en bandeja la pregunta:

¿Qué es mejor? ¿Luchar contra la despoblación incentivando la llegada de personas de otros territorios aprovechando el tirón del teletrabajo o apostar por la digitalización de las pequeñas empresas locales para intentar asegurar que sigan fortaleciendo sus raíces al territorio?

Pues bien, es complicado contestar a la pregunta porque, evidentemente, nadie ha dado aún con la fórmula mágica. La despoblación es un hecho y hay quien vaticina que es ya imposible de frenar.

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Sin embargo, al mismo tiempo, la mayor parte de administraciones siguen empeñadas en hallar el secreto.

El mes de septiembre ya nos ha dejado en apenas 10 días dos ejemplos de esta incesante búsqueda. La primera está promovida por la Diputación de Cádiz y el objetivo es impulsar la digitalización de las pymes de los entornos rurales.

El proyecto se llama Oficina Acelera Pyme Cádiz.es Digital y acaba de ser seleccionado como uno de los que recibirán las ayudas convocadas por la entidad pública empresarial Red.es, adscrita al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, y que se financian con fondos europeos Next Generation.

En concreto, se le ha concedido una subvención de 410.000 euros, con los que se sufragará el 80% del importe total necesario para la consecución de esta iniciativa, que supondrá una inversión de 512.000 euros. El resto hasta alcanzar esa cifra, es decir, 102.500 euros, serán aportados por la administración provincial.

La iniciativa surge de las reuniones mantenidas con representantes de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes, asociaciones empresariales y agentes de interés al objeto de definir propuestas que dinamicen el tejido empresarial y apoyen su transformación digital, puesto que se consideran vías fundamentales para aumentar la competitividad, crear empleo y fijar la población al territorio.

El objetivo es acelerar el proceso de digitalización y aumentar la capacidad tecnológica de las pymes, autónomos y autónomas rurales, para lograr un tejido empresarial más competitivo en un mercado globalizado.

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También persigue involucrar a las instituciones públicas locales y el resto de agentes sociales y económicos en la consecución de la transformación y dinamización del sistema productivo local para fomentar la cohesión social, explican desde la Diputación.

Acceder a nuevos clientes y mercados, agilizar y flexibilizar los procesos productivos, conocer mejor el perfil de sus clientes y anticiparse a la demanda, mejorar la eficiencia y productividad y desarrollar nuevos productos y modelos de negocio son algunas de los logros que se pretenden conseguir.

Para ello, se ofrecerán diversos servicios como el diagnóstico digital de la empresa, recomendaciones para la digitalización de su sistema productivo, asesoramiento y asistencia en la implementación de soluciones tecnológicas, difusión de actividades que propicien la transmisión de conocimiento, así como debatir sobre las tecnologías disruptivas que mejoren la competitividad de las empresas, como big data, servicios cloud, blockchain, inteligencia artificial, robótica de servicios, ciberseguridad, realidad virtual y realidad aumentada, impresión 3D, vehículos autónomos o IOT (internet de las cosas).

El servicio se prestará desde dos oficinas que estarán ubicadas en Alcalá de los Gazules y Villamartín, cuya ubicación geográfica se ha considerado estratégica para atender a las pymes situadas en los municipios de menos de 20.000 habitantes de la provincia.

Oficinas presenciales y virtuales

El servicio presencial se complementará con una oficina virtual de atención a pymes y la creación de un Observatorio Digital Acelera Pyme Cádiz, desde donde se analizará la madurez digital de las empresas de la provincia y se propondrán actuaciones para su aceleración e incorporación a las tecnologías emergentes.

Habrá otros 50 espacios físicos disponibles, fruto de los acuerdos alcanzados con ayuntamientos, grupos de desarrollo rural, asociaciones empresariales y el conjunto de agentes que conforman la red de valor que ha impulsado la Diputación para la ejecución de este proyecto.

Además, gracias a la participación del Área de Igualdad de la Diputación y en virtud de un acuerdo con la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales Sol Rural se garantizará que todas las actuaciones propuestas tengan en cuenta la perspectiva de género.

Y de Cádiz a Cáceres. De Andalucía a Extremadura. Otra diputación, en este caso la cacereña, reconoce que "el esfuerzo realizado en los últimos años por las distintas administraciones para implantar infraestructuras de telecomunicaciones, suelo industrial y dotacional de servicios ha permitido mejorar las condiciones para que las empresas puedan instalarse y contar con los recursos necesarios para el desarrollo de su actividad".

Los dos proyectos suman más de 700.000 euros de inversión y la propuesta gaditana está cofinanciada por fondos Next Generation.

Esa es, de alguna manera, la excusa que sirve de base para justificar la segunda estrategia, la que tiene que ver con atraer a personas de cualquier otro territorio aprovechando el tirón del teletrabajo.

'Cáceres Destino Digital' es el proyecto para el "fomento de la relocalización de puestos de trabajo y la implantación del teletrabajo" en municipios de la provincia.

Tal como indica el diputado de Innovación y Provincia Digital, Santos Jorna, se continúa con esta "apuesta para seguir avanzando en la lucha por el reto demográfico en el medio rural, mostrando a los municipios de la provincia como lugares idóneos en los que trabajar".

Para ello, esta segunda convocatoria, que cuenta con un presupuesto de 200.000 euros, se dirige a empresas vinculadas con el desarrollo software, servicios de telecomunicaciones y transformación digital, así como servicios auxiliares asociados al consumo de los productos desarrollados por las primeras, y que deseen establecer en la provincia de Cáceres nuevos centros de trabajo o ampliar sus plantillas ubicando a los trabajadores en ellos.

Además, también se dirige a teletrabajadores autónomos que se establezcan en el territorio. El objeto de estas ayudas, por tanto, incidirá "tanto en la captación de nuevos residentes, como en mantener a nuestra población joven".

"Todo ello -explica- contribuirá no solo a la lucha contra la despoblación, sino además al fomento de la implantación en nuestro territorio de empresas del ámbito tecnológico que enriquezcan el entorno empresarial existente".

Las tres líneas de financiación tienen que ver con la generación de talento para recualificar las empresas; la relocalización del talento, con la apertura de nuevos centros de trabajo ampliación de puestos de trabajo, y el fomento del teletrabajo; y los centros de trabajo compartido.

Los gastos subvencionables serán gastos de personal y gastos corrientes en bienes y servicios. La cuantía de las ayudas dependerá del ámbito territorial en el que se desarrolle el proyecto, valorando más la ubicación en municipios menores de 20.000 habitantes.