De la misma manera que se puede aprovechar el calor residual para terminar un guiso o un cocido apagando el fuego antes de tiempo, hay quien ve la posibilidad de aplicar esta regla a los teléfonos móviles. El fin no sería otro que aprovechar esa energía en forma de calor para cargar nuestros smartphones.

¿Es posible? Sí, lo es. Al menos así lo piensa IKEA, que ya cuenta con un prototipo de mesa que podría hacer las veces de cargador solo aprovechando lo calentita que está nuestra taza con el café recién hecho.

Heat Harvest, aprovecha el calor de tu casa

El proyecto ha nacido en Space10. Esa es la gran cocina para la innovación de la que dispone el gigante del mueble en Copenhague. Allí, dos ingenieros, Sergey Komardenkov y Vihanga Gore, han dado forma a esta mesa que puede recargar el móvil gracias al calor de lo que se ponga sobre su superficie. La idea ha sido bautizada como Heat Harvest. Cabe recordar que IKEA cuenta ya con muebles con cargadores inalámbricos desde hace varios meses.

El principio que rige este invento es la termoelectricidad, un fenómeno ampliamente conocido. Básicamente lo que se hace es aprovechar las diferencias de temperatura entre dos superficies para generar electricidad. Un proyecto español, que el próximo año saltará al mercado, propone hacer lo propio con los automóviles.

Heat Harvest, la termoelectricidad y el calor como forma de energía

Con un pequeño dispositivo en el tubo de escape, RegeneRING -creado por dos ingenieros gerundenses- aprovecha el calor que se emite por esta pieza de nuestros coches para crear electricidad para autoabastecerse. La idea es que, incluso, su invento pueda sustituir al alternador del motor, suponiendo un ahorro considerable en combustible.

Dos ingenieros españoles proponen lo mismo que IKEA pero aplicado a los coches: una pieza en el tubo de escape podría generar electricidad para autoabastecer el automóvil

Volviendo a la idea de la mesa que puede recargar el móvil, Heat Harvest podría aprovechar el calor de otros objetos que tengamos en casa. Bien las cazuelas o las sartenes que disponemos sobre la encimera antes de comer o también electrodomésticos.

Y es que el otro fin del proyecto sería crear ‘parches’ que se puedan adherir al horno o a la televisión y así aprovechar el calor que emiten. «Nos imaginamos estos dos productos para esta tecnología», aseguran los creadores.

Almohadillas para adherir a la televisión

«El primero son las mesas que extraen el calor de objetos calientes que se colocan en la parte superior. Esto puede ser cualquier cosa, desde una olla de sopa a una sartén . El segundo producto serían almohadillas de recolección de calor que se puede colocar debajo de la TV, decodificadores o adaptadores de energía que emiten calor en cualquier lugar en el hogar » .

Puestos a imaginar, que bien hubiese venido a los propietarios de un smartphone con el Snapdragon 810 un sistema para aprovechar el calor que emitía este procesador.

Vía | Omicrono