Son calzoncillos, calcetines y camisas de cuatro clases diferentes: Luxury, Fashion, Basic y Boys. Todas las piezas tienen algo en común: son de la marca CR7 y el delantero del Real Madrid se embolsa un 13% por la venta de cada pieza, tal y como adelanto El Mundo este fin de semana. Es decir, si alguien se compra un calzoncillo turbopacket -en lenguaje elegante se llaman boxer slip- que se venden bajo el nombre del portugués, estará destinando más de una décima parte de la compra a engrosar las arcas de Cristiano Ronaldo (31).

La colección de este año ha sufrido algunas modificaciones y además de aparecer el logo CR7 en la goma de la cintura de los calzones, en algunos se lee Ronaldo, nombre en el que la A ha sido sustituida por una imagen del futbolista con las piernas abiertas, esa clásica pose que suele usar tras marcar un gol (son además los más vendidos en el Corte Inglés).

Este centro comercial es uno de los que tiene a la venta la marca del portugués. En Barcelona, no obstante, por ahora sólo los venden en el establecimiento de Plaza Catalunya, el más céntrico, al que son asiduos los turistas. "Vendemos muchos, nos acaban de llegar los nuevos y van muy bien", comenta a EL ESPAÑOL una dependienta, que asegura a su vez que el pasado fin de semana no se vendieron más de lo habitual. Curiosamente en Madrid, CR7 tiene menos tirón, o al menos sus calzoncillo. "No vende mucho, no", dice un comercial de Corte Inglés Castellana, "Cristiano, sinceramente, no vende, hay otras marcas que funcionan mejor, ni el fin de semana con el partido hemos vendido demasiado".

Según lo que comentan los dependientes, CR7 tiene más tirón en Barcelona, lo que podría ser motivado porque el centro que vende sus calzoncillos está abarrotado de turistas en busca del souvenir. O quizás los comerciales barceloneses saben vender mejor sus productos... 

Cada calzoncillo cuesta 24,95 euros, los pares de calcetines se venden por 11,95 euros, y las camisas, 64,95 euros. Las prendas se pueden encontrar también en internet, en centros comerciales y tiendas especializadas. 

La relación entre CR7 y la firma danesa JBS Textile Group empezó en 2013, aunque Cristiano había posado antes en ropa interior. Como David Beckham, el portugués fue imagen de Emporio Armani primero y después se decidió por su propia marca. Un hito: muchos recordarán el cartel de 15 metros de altura que adornó el Palacio de Cibeles de Madrid con la figura de Cristiano vestido solo con unos calzoncillos con su logo en el centro.

La empresa siempre ha rechazado comentar el dinero que recibe Cristiano por prestar su imagen, aunque Michael Astrup, director general de la compañía, admitió hace unos meses que las ventas de la empresa han aumentado, sin concretar números de ventas. Sí dio un detalle: "Hemos pasado de exportar a cinco países a hacerlo a 54", dijo Alstrupo a Reuters. "Es un crecimiento muy sólido para una como compañía como la nuestra así que nos gustaría seguir explorando el mercado". 

Cuando el acuerdo tuvo lugar, en 2013, tanto el futbolista como la compañía se congratulaban. "Estoy realmente muy emocionado con mi nueva colección de ropa interior", dijo entonces Cristiano. "Es importante que las personas con quienes trabajamos representen los valores de nuestra empresa. ¿Quién mejor para representar la insuperable calidad que uno de los mejores futbolistas del mundo?", añadió el propietario de la compañía, Claus Bjerg Sørensen.

Tras los escándalos publicados este fin de semana, habrá que ver la continuidad de Cristiano como imagen publicitaria. Desde JALEOS se ha intentado contactar con la compañía pero no se ha obtenido respuesta. JBS es una marca de ropa interior que fue fundada en Oslo en 1939, tal y como cuentan ellos mismos en su página web.

En la actualidad, según la empresa, son líderes de ventas en Escandinavia tanto en "volumen de negocio, como de beneficio y de popularidad". Es una compañía familiar que tiene unos valores empresariales muy claros: "Comodidad, calidad, innovación y personalidad". La empresa, que también cuenta con la tenista Caroline Wozniacki como marca de ropa femenina, cuenta con 300 empleados y exporta a una veintena de países.

En 2014, tras el éxito de la aventura empresarial conjunta, JBS encargó una colección de camisas (al principio eran sólo calcetines y calzoncillos). El portugués dijo tras la firma: "Parte de mi credo es ser siempre lo mejor que puedas. La camisa de forma perfecta le da al hombre una confianza para convertirse en la mejor versión de sí mismo".

El encargado del diseño de las colecciones no es, claro, el futbolista. Cuentan con la supervisión del diseñador de ropa masculina y femenina Richard Chai, quien ha trabajado para marcas como Marc Jacobs y Donna Karan. Cuando se anunció el nombre de Chai, él mismo comentó: "Es un placer para cualquier diseñador poder trabajar con una persona tan reconocida y mediática como Cristiano Ronaldo".