Tras un intenso debate, el Consejo de Administración de RTVE ha aprobado por mayoría absoluta la retirada de España de Eurovisión 2026 si no se expulsa a Israel de Eurovisión.
La decisión ha generado un auténtico terremoto mediático y, como era de esperar, ha sido analizada en la mayoría de programas de televisión de nuestro país.
Opiniones hay para todos los gustos, aunque una de las más contundentes llegó de la mano de Máximo Huerta.
"No tienen huevos de tocar al fan de fútbol, pero el de Eurovisión es mucho más débil", expresó sin ningún tapujo el periodista y colaborador de Vamos a ver.
Con esta decisión, España se convierte en el quinto país en confirmar su retirada tras Irlanda, Países Bajos, Islandia y Eslovenia, lo que dibuja un escenario inédito en la historia del festival.
En pleno debate sobre ello, el programa conectó con José Prieto, un eurofán que no dudó en cargar contra la decisión de RTVE por considerarla incoherente.
"Han comprado los derechos del Mundial de Fútbol, que son 57 millones de euros que se van a gastar en una competición en la que Israel ya está participando, no como en Eurovisión, que no se sabe si lo hará", sentenció ante las cámaras.
Sus palabras encontraron eco en Máximo Huerta, que volvió a mostrarse muy crítico con la gestión del conflicto: "Eurovisión nace como un consenso cultural de toda Europa; ahora, se rompe cuando hay una cuestión económica", apuntó.
Huerta fue más allá: "Se le pide muchísimo más al fan de Eurovisión que al aficionado de otros espectáculos... es más débil y vehemente respecto al cariño porque se viven otras circunstancias musicales. Se le ningunea", criticó.
Presentadora e invitados en plató.
La presentadora no tardó en adentrarse en el debate con una pregunta más: "¿Se está utilizando esto como escudo social para tapar temas como la corrupción, que ahora mismo le viene de maravilla al Gobierno?"
"Se secuestra demasiado a esos sentimientos colectivos, que son más que lícitos", añadió. "Si esto pasara con el Mundial de Fútbol, se armaría la de Dios", expresaron los colaboradores.
"Si convertimos a Eurovisión en una especie de ONU, la vamos a liar. Al final, van a cantar fenomenal los ucranianos", sentenciaron finalmente desde plató.
