Los enfrentamientos entre Rafa Mora y cualquiera de sus compañeros son prácticamente diarios. Pero en la tarde de este lunes 14 de noviembre, Carmen Borrego ha sido la diana de los dardos del extronista de Mujeres y Hombres y Viceversa.

Todo comenzaba cuando Adela González, que estaba hablando con el reportero Kike Calleja en directo, ha cortado su conversación al darse cuenta que algo estaba ocurriendo en plató entre Rafa Mora y Carmen Borrego y es que la colaboradora ha abandonado el estudio muy enfadada con su compañero.

La presentadora, que no paraba de preguntar qué es lo que había ocurrido, Belén Esteban le comentaba que había hecho un comentario sobre la nuera de Borrego, Paola Olmedo. Y es que Kike Calleja se encontraba esperando a Raquel Mosquera fuera de su peluquería, una guardia que, al parecer, le ha recordado a la que hizo el programa en el centro de uñas de la mujer del hijo de Carmen.

"He dicho que me ha recordado a Paola, cuando se escondió en la tienda de uñas y no salía", apuntaba Mora. "No te pongas tan pesado Rafa, a cada uno le duele su tema", le replicaba Belén Esteban.

En ese momento, Rafa y Adela salían del plató en busca de su compañera, que se encontraba al lado del puesto de dirección muy nerviosa y sin parar de moverse. "¡No voy a aguantar a este señor ni un minuto más! Yo no estoy bien con este tema. ¡No quiero ni verle!". 

Al darse cuenta del daño que le estaba causando a la hija de María Teresa Campos, el valenciano le pedía disculpas. "No quiero tu perdón, no quiero ni verte, no quiero nada. Siempre es igual, daño, daño y más daño. Tú eres así, yo no", respondía Carmen. 

"No te quiero ni escuchar, no se puede estar machacando a una compañera todos los días. ¡Estoy hasta los cojones de este tío ya!", insistía la hermana de Terelu Campos. "Ni me nombres, ¡basta ya de maltratarme!". 

"No he hablado de la relación de Carmen Borrego con su hijo", ha explicado él y que solo ha comparado "dos escenas" que le han recordado. "Si te he hecho daño te pido disculpas, no sabía que estabas tan sensible con el tema", le ha dicho él. "Hasta que no me sacas de quicio no paras, no vengo aquí para estar aguantándote toda la tarde. No tengo ganas de perdonarte porque dentro de 30 segundos lo vas a volver a hacer", sentenciaba Borrego.