"La Tierra es redonda y Rocío Carrasco es una víctima". Con esta sentencia, Carlota Corredera expresaba este miércoles la postura oficial de Telecinco con respecto al relato de la protagonista de Rocío, contar la verdad para seguir viva. Una férrea defensa que llega tras 20 años de linchamiento público en los mismos platós donde ahora se cierra filas en torno a ella.

La premisa central con la que se anunció la emisión de la serie documental fue que Rocío Carrasco rompía su silencio de dos décadas para desmontar "la gran mentira de la prensa del corazón". Sin embargo, ni toda la prensa fue cómplice ni la protagonista estuvo en silencio todo ese tiempo.

Telecinco trata ahora de ignorar un pasado que no favorece a la cadena, pero la hemeroteca y el propio relato de Rocío Carrasco delatan una realidad irrefutable. La cadena ignoró sistemáticamente la otra versión de la historia para favorecer a un personaje mucho más visible y rentable: Antonio David Flores.

En la emisión del séptimo episodio el miércoles 14 de abril se desvelaba una anécdota que pone en evidencia la forma de actuar de Mediaset en esta historia. La hija de Rocío Jurado explicaba con todo lujo de detalles cómo se gestó la firma del convenio regulador por el que cedía la custodia compartida a su exmarido.

Según narró Rocío, Antonio David evitó durante seis meses firmar el convenio. Un tiempo en el que seguía recorriendo los platós lamentándose por tener que ver a sus hijos cada dos fines de semana. Harta de la farsa, Carrasco llamó a Xavier Sardà para contarle la verdad. El presentador le aseguró que obligaría al ex guardia civil a firmar el convenio si quería mantener su trabajo en Crónicas Marcianas y, al día siguiente, Antonio David rubricaba el documento.

A pesar de que Sardà conoció entonces la gran manipulación de Antonio David, estos hechos no se han revelado hasta 20 años después. Nadie en la cadena dio voz a Rocío Carrasco y el show continuó desarrollándose con total normalidad tras la firma del convenio, el cual además se utilizó como arma arrojadiza contra la protagonista por 'vender' a sus hijos a cambio de unas supuestas condiciones económicas que jamás existieron.

Otra de las periodistas señaladas en el documental ha sido Lydia Lozano, que se hizo eco de una versión totalmente distorsionada del convenio regulador. La colaboradora, que este miércoles estaba presente en el plató, ha confesado sin rubor que se limitó a publicar lo que José María Franco, exchófer de Rocío Jurado, le trasladó, sin comprobar en ningún momento la veracidad de los hechos.

Lo cierto es que, hace ahora diez años, Lydia comentó aquella noticia en Sálvame. "Antonio David me dijo 'casi me hundes', porque ellos habían pactado que nadie tenía que saber ese convenio". En aquel momento, una enfadadísima Rocío Carrasco entraba por teléfono en el programa para desmentir el pacto: "Quiero que Lydia Lozano me diga qué es lo que yo he pactado". La colaboradora, no obstante, acababa retractándose a pesar de que afirmaba tener documentos y pruebas.

"Es tuya la información pero no la das porque sabes que no es verdad, como el 90% de las cuestiones que tocas", espetó Rocío. "Llevo 12 años soportando informaciones como esta", añadió.

Cabe recordar, además, que Telecinco ha estado vinculada laboralmente a Rocío Carrasco durante varios años en diferentes épocas y programas. Resulta bastante significativo que muchas de las personas que han trabajado junto a ella, como María Teresa Campos, Belén Rodríguez o David Valldeperas, se han convertido en sus más fieles defensores y amigos, pero su propia cadena ha decidido seguir dando voz a Antonio David Flores, quien se prestaba a seguir dando juego televisivo hablando de su vida privada, al contrario que su exmujer.

Con estos antecedentes, es lógico pensar que Mediaset ha censurado deliberadamente su pasado porque, en efecto, el testimonio de Rocío Carrasco va contra la propia cadena y pone en evidencia una mala praxis profesional que, por mucho que se empeñen, no es compartida por toda la industria. Rocío lleva 20 años intentando hablar y, hasta que no lo ha hecho abriéndose en canal frente a las cámaras, creando un producto atractivo y rentable para la cadena, no han querido escucharla.

Noticias relacionadas