Sareb estrecha lazos con la socimi Techô para proveerla de viviendas sociales ante su salida a bolsa
Ambas entidades ya colaboran en Almería y Sevilla y tienen previsto hacerlo en siete provincias más.
15 abril, 2024 02:29La socimi Techô, destinada a dar una solución habitacional a personas sin hogar y que saldrá a cotizar a finales de abril, ha encontrado un potente aliado para su debut: la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
La empresa inmobiliaria, controlada en su mayoría por el Estado, lleva desde 2022 apostando por su vertiente social y, por tanto, por la vivienda asequible como una de sus vías prioritarias para canalizar su gran cartera de pisos. Y la socimi promovida por Blanca Hernández (Ebro Foods) se ha convertido en un interlocutor de primer orden.
Techô cuenta con diversos proveedores de vivienda y, entre ellos, figura la Sareb, con quien tiene una estrecha colaboración. De hecho, la Sareb y Techô mantienen reuniones periódicas para cruzar la cartera de la primera con las necesidades de la segunda y tratar de buscar vivienda que se ajuste a las necesidades de la socimi.
La primera operación que la Sareb cerró con Techô fue la venta de seis viviendas en San Isidro de Níjar (Almería) por 450.000 euros. A partir de ahí, se abrió entre ambas compañías una línea de colaboración permanente que, más tarde, ha fructificado en la venta de otra vivienda en Sevilla.
En estos momentos, la Sareb está analizando con Techô la posibilidad de venderles más viviendas en Madrid, Barcelona, Córdoba, Santa Cruz de Tenerife, Valencia, Alicante, Valladolid y la propia Sevilla.
Las monjas ‘okupas’ de Níjar
Las viviendas de segunda mano de las que dispone la Sareb tienen un precio medio de 92.000 euros a nivel nacional y están ya construidas, lo que permite su uso inmediato. De ahí que suelan encajar a la perfección para fines sociales.
En Níjar, en el interior de la provincia almeriense, se ha dado ejemplo de cómo maximizar este tipo de colaboraciones entre el sector público y el privado.
La Sareb se adjudicó en un procedimiento judicial un total de 21 viviendas procedentes de la empresa Construcciones López Villegas SL. Los ocupantes irregulares de seis de las viviendas eran la Comunidad de las Hermanas Mercedarias, cuya misión es atender a personas extremadamente vulnerables. En su caso, una buena parte son inmigrantes temporeros que vienen a trabajar el campo español.
En este contexto, la socimi Techô contactó con la Sareb para adquirir estas viviendas y, posteriormente, cederle el uso a la comunidad religiosa, para que pudieran continuar desarrollando su labor. Incluso, la Sareb se ha comprometido a ofrecer a Techô la venta del resto de viviendas de Níjar cuando queden disponibles.
Como publicó EL ESPAÑOL-Invertia, y con otros proveedores más allá de la Sareb, Techô ya ha adquirido 190 inmuebles en ocho provincias (Madrid, Barcelona, Zaragoza, Valladolid, Sevilla, Córdoba, Almería y Murcia) y ha dado cobijo a más de 800 personas.
El modelo de negocio de la socimi es adquirir microcarteras inmobiliarias y alquilarlas a asociaciones colaboradoras que se dedican a facilitar hogares a colectivos con exclusión social. Techô articula la operativa mediante una socimi que está a punto de listarse en BME Growth y que retorna unos beneficios de entre el 3% y el 5%.
El modelo del Reino Unido
“La aplicación del principio de sostenibilidad y utilidad social con la que se enriqueció el mandato de Sareb en 2022 nos lleva a actuar siendo especialmente sensibles a la huella social que deje nuestra actividad. Ello nos impulsa a estar ‘pegados al terreno’, lo que nos lleva a conocer y a apreciar la labor positiva que realizan algunas ONG y a estar abiertos a colaborar con las mismas cuando se presenta alguna ocasión”, tal y como expone Javier Torres, presidente no ejecutivo de la Sareb.
En este sentido, desde la Sareb abogan por que España adopte un modelo similar al del Reino Unido. Allí las Administraciones Públicas dotan de recursos a entidades del ‘tercer sector’ para que desarrollen vivienda pública y estos agentes están sometidos a la auditoría del Estado para mostrar los resultados obtenidos con la iniciativa.
Ante la falta de vivienda social y asequible en España, y dado que se tardan muchos años en construir un parque público, esta vía podría ser implementada con voluntad política y proyectos como los de Techô o la Fundació Hàbita 3, con quien la Sareb también colabora en Cataluña.
“Sareb estaría encantada de ofrecer su experiencia en la gestión propia de su cartera de cerca de 7.000 alquileres sociales ya sea a gestores de entidades públicas de vivienda social como a entidades del ‘tercer sector’ presentes, o las que se puedan promover a futuro”, asegura Torres.