El grupo alemán Flixbus anunció este jueves un acuerdo con el francés Transdev para comprar las marcas Isilines y Eurolines, con lo que se queda solo en el transporte interurbano por autobús en Francia junto a Ouibus, cedido recientemente por la empresa pública SNCF a Blablacar.

En un comunicado conjunto, Flixbus y Transdev indicaron que el primero incorpora Isilines, que solo cubre líneas interiores en Francia, y Eurolines, con sede en Francia, Holanda, Bélgica, República Checa y España y que cubre 25 países.

Los mercados de Eurolines pasarán a estar supervisados por dirigentes de Flixbus en esos países y desde este jueves los equipos de una y otra empresa trabajarán durante los próximos meses para la integración de sus organizaciones y redes.

Para el presidente de Transdev, Thierry Mallet, la cesión de estas filiales al término de unas negociaciones iniciadas el 4 de marzo es consecuencia de su "nuevo plan estratégico", que busca centrarse en el transporte público urbano y en el transporte para las empresas.

El director general de Flixbus en Francia, Yvan Lefranc-Morin, hizo hincapié en que la puesta en común de sus actividades con las de Isilines y Eurolines refuerza su red europea y favorece su crecimiento futuro "en mercados clave".

Desde la liberalización del sector en 2015 por el entonces ministro de Economía, Emmanuel Macron, las empresas que operan en el transporte interurbano por autocar en Francia se han librado a una competencia feroz, y todas han tenido enormes pérdidas.

La consecuencia ha sido la progresiva desaparición de la mayor parte, y ahora quedan Flixbus, líder europeo del sector con más de 100 millones de pasajeros transportados desde 2013, y Ouibus, creada por la ferroviaria estatal SNCF.