Jude Bellingham protesta a Gil Manzano en Mestalla

Jude Bellingham protesta a Gil Manzano en Mestalla Reuters

Fútbol

Dos partidos de sanción a Jude Bellingham por su "it's a fucking goal" a Gil Manzano

El Comité de Competición castiga al futbolista del Real Madrid al entender que hubo menosprecio o desconsideración hacia el colegiado en Mestalla.

6 marzo, 2024 12:02

Jude Bellingham se perderá los dos próximos partidos de Liga del Real Madrid. El centrocampista inglés ha sido sancionado por el Comité de Competición, que considera menosprecio o desconsideración hacia el árbitro su incidente con Jesús Gil Manzano al acabar el partido contra el Valencia en Mestalla.

Después de que Gil Manzano pitara el final del partido cuando Bellingham marcaba el gol que daba la victoria al Madrid, el '5' del Madrid recriminó al colegiado la decisión y le gritó en repetidas ocasiones: "¡It's a fucking goal!" ("¡Es un jodido gol!", en castellano).

El Real Madrid recurrirá la sanción ante Apelación para intentar que, al menos, se rebaje un partido. Ahora mismo, Bellingham se perdería la visita del Celta al Santiago Bernabéu el próximo domingo y el partido en Pamplona contra Osasuna, del sábado 16 de marzo.

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En el acta del encuentro de Mestalla, Gil Manzano reflejó así la roja mostrada a Bellingham: "Tras la finalización del partido y aún en el terreno de juego, se dirigió hacia mí corriendo en actitud agresiva y a gritos, repitiendo en varias ocasiones 'It's a fucking goal'".

El Real Madrid alegó la existencia de un error material manifiesto, tras negar la actitud agresiva que el colegiado atribuye al jugador en el acta y afirmar que Bellingham solo se dirigió una vez al árbitro, y no es varias ocasiones y aportó prueba de vídeo de los hechos.

El club argumentó también que la expresión 'it's a fucking goal', que traduce por 'es un maldito gol', tenga carácter ofensivo o insultante y que mantuvo que tampoco lo tendría si se optase por la traducción literal ("es un puto/jodido gol"), pues se trata de expresiones plenamente aceptadas en el lenguaje común.

Para el Comité, el repetido visionado de las imágenes no permite "concluir, más allá de toda duda, que la acción que motivó la expulsión no se produjo tal y como la describió el colegiado y, en definitiva, probar el error material manifiesto en el relato arbitral".

El árbitro Gil Manzano muestra tarjeta roja a Jude Bellingham, autor del gol anulado en el último momento del partido, tras su protesta.

El árbitro Gil Manzano muestra tarjeta roja a Jude Bellingham, autor del gol anulado en el último momento del partido, tras su protesta. EFE

En concreto afirma que no le ha permitido concluir que el jugador no gritase, pues no se le escucha en ningún momento, y que no repitiese varias veces la expresión 'it’s a fucking goal', ya que el el corte dura 11 segundos y no muestra lo que pasó inmediatamente antes, y que su actitud no fuese agresiva.

"Todo esto (el tono y la actitud del jugador y el número de veces que se repite la frase) resulta determinante para contextualizar la acción y el efecto de las palabras concretas pronunciadas por el jugador, más allá de su traducción literal. Si este órgano disciplinario aceptase la versión del club, que no alcanza, como se ha dicho, el umbral de prueba requerido, estaría realizando una sustitución de la labor arbitral que no le corresponde", concluye la resolución.