La noche en Cleveland dejó muchas grandes imágenes. LeBron James anotó la canasta decisiva del partido de las estrellas para darle la victoria a su equipo frente al Team Durant. Con ello, le robó parte del protagonismo al héroe de la noche, Stephen Curry. El base de los Golden State Warriors anotó un total de 50 puntos, a solo dos del récord absoluto, y anotó 16 triples, más que nunca en un All Star. 

Sin embargo, por encima de ambos, muchos medios en Estados Unidos están destacando la figura de otra gran estrella de la NBA. Se trata de Luka Doncic. El esloveno de los Dallas Mavericks no hizo un gran partido fiel a su filosofía de tomarse poco en serio este tipo de partidos, pero aun así dejó la imagen de la noche. 

Mientras se encontraba haciendo una pequeña ronda de calentamiento junto a varios compañeros, el base llegado a la NBA procedente del Real Madrid se cruzó con la mayor leyenda de este deporte. Michael Jordan había bajado a la pista para participar en un acto y no pudo evitar abrazarse al joven genio de los 'Mavs', uno de los jugadores más en forma de la actualidad. 

Lo realmente llamativo de la escena es como es el propio Jordan, la mayor institución del mundo de la canasta, quien se lanza corriendo y decididamente a abrazar a Luka. De hecho, le agarra y le levanta para mostrarse cercano y afectuoso con él. Un gesto que muchos han interpretado como una especie de relevo generacional. Doncic está llamado a ser uno de esos jugadores que lideren la nueva NBA después de que estrellas como LeBron James o Stephen Curry agoten sus mejores días. Y quien mejor para entregar esa magia que 'Air Jordan'. 

Encuentro de galácticos

Juntos compartieron unos segundos de pequeña charla y carantoñas para celebración de todo el pabellón de Cleveland que seguía con atención el encuentro entre el pasado, el presente y el futuro de la mejor liga del mundo. Una imagen que se ha hecho muy viral en redes sociales y que está dando la vuelta al mundo en las últimas horas. No es para menos. 

El partido de Doncic fue realmente discreto con solo 24 minutos de juego y 8 puntos y 3 asistencias. Sin embargo, con ese encuentro con Michael Jordan ya había dejado la acción de la tarde noche en Cleveland y en la NBA. La relación entre ambos es fantástica y así lo han puesto de manifiesto. 

Habrá que esperar para ver si Luka alguna vez decide ponerse un poco más en serio para este tipo de partidos, los cuales siempre se toma como una fiesta para pasárselo bien y evitar males mayores como pudieran ser una lesión o algo similar. 

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