Nunca el sector de la tecnología sanitaria había estado tan presente en los titulares. Desde que apareciera en nuestras vidas la covid-19 y se decretara el estado de alarma en España el pasado 14 de marzo, no hemos parado de escuchar conceptos propios de este sector que contribuye, desde siempre, a salvar vidas.

Hemos hecho un máster en respiradores y ventilación mecánica, en EPIS y desinfección de manos y, aunque todos hubiésemos deseado que esto no hubiese pasado, es tiempo de analizar y de dar soluciones a todo aquello que no funcionaba -y no sabíamos- de nuestro entramado sanitario.

En compañías multinacionales como Medtronic, con una amplia trayectoria en innovación y desarrollo de dispositivos y soluciones tecnológicas, hemos podido comprobar durante la crisis por covid-19 que nuestro sector, además de proveer de producto -como respiradores para restaurar la salud de pacientes críticos-, también tiene un papel muy relevante en el control del paciente fuera del hospital, con una calidad igual o superior al seguimiento presencial, gracias a la incorporación de herramientas digitales para profesionales y pacientes

Tecnología sanitaria en una imagen de archivo.

Tras dos meses de pandemia sentimos que hoy somos más necesarios que nunca. A marchas aceleradas estamos dirigiendo todos nuestros esfuerzos a trabajar en colaboración con otras empresas de desarrollo de soluciones tecnológicas y con los propios hospitales, para que la transformación digital del sistema sanitario sea una realidad en un plazo relativamente corto.

Un ejemplo real es nuestro centro de soporte de seguimiento remoto, dentro del área de soluciones digitales de salud. Se trata de una plataforma digital previamente diseñada para el seguimiento a distancia de pacientes implantados con dispositivos cardiacos o bombas de insulina, que ya funcionaba con éxito en términos de resultados en salud y eficiencia del sistema.

Es tiempo de analizar y dar soluciones a todo aquello que no funcionaba -y no sabíamos- de nuestro entramado sanitario. 

Con esta base tecnológica ya creada, que conecta a tres bandas el centro de soporte, el hospital y el paciente fuimos capaces de adaptar el tiempo récord los parámetros, con el fin de controlar a distancia a pacientes de covid-19. Ahora mismo es una solución que utilizan varios hospitales del ámbito público y privado, para monitorizar a estos pacientes desde sus casas, en cuarentena, una vez han pasado por Urgencias o recibido el alta tras su hospitalización.

Esto nos demuestra que somos capaces de aportar valor y de superar, entre todos, barreras hasta entonces infranqueables, como la regulación o los sistemas de adopción de tecnología desiguales.

En esta línea, existen otras áreas que ya trabajan de forma remota para aumentar el acceso a las terapias más innovadoras y efectivas. Es el caso de la diabetes tipo 1, donde la formación de pacientes es clave para lograr los mejores resultados y control de su salud. Desde que comenzara la pandemia hemos logrado un aumento de pacientes portadores de bomba de insulina, un sistema de control híbrido que incluye la monitorización continua de glucosa conectada con tecnología bluetooth. Estas formaciones eran presenciales en el hospital. Ahora no hay barreras para seguir formando a los pacientes, aumentando así el acceso a las mejores soluciones ante patologías que impactan sobre la salud, como es el caso de la diabetes.

Este es el impacto real de la covid-19 para nuestro sector: una nueva realidad marcada por las soluciones digitales.

Esto nos lleva a la reflexión y a la ejecución de un plan de acción que ayude a mejorar nuestro sistema sanitario, siendo proveedores de soluciones que permitan el control remoto o a distancia de los pacientes.

** Maria Vila, directora general de Medtronic en España y Portugal.