Según recoge el informe, el 86% de los alumnos utiliza algún dispositivo conectado a Internet al menos una hora al día mientras está en el aula, y el 45% de los estudiantes consulta sus redes sociales mientras se imparte la clase.

El uso de los dispositivos electrónicos, sin embargo, no siempre se hace con buenas intenciones. En este sentido, casi la mitad de los estudiantes (47%) afirma haber visto u oído a otro alumno usar su dispositivo en clase para hacer trampas en un examen, mientras que el 21% admite haber copiado con su móvil.

EDUCACIÓN Y CIBERSEGURIDAD

Junto con el uso de los dispositivos, el estudio de McAfee revela también otros problemas como el ciberacoso, así como la importancia de la ciberseguridad en la educación. Además de crear una fuerte dependencia tecnológica, el uso de los dispositivos conectados por parte de los estudiantes también supone un riesgo en materia de materia de ciberseguridad. Uno de cada cuatro alumnos (el 24%) accede con éxito a contenidos bloqueados o prohibidos.

La seguridad en Internet se convierte también en un aspecto importante dentro de las aulas. Así, el 80% de los alumnos cree que su escuela toma las medidas necesarias contra las ciberamenazas en el colegio, mientras que el 86% se siente informado sobre educación en ciberseguridad antes de usar los dispositivos de la escuela.

LA FAMILIA Y LA EDUCACIÓN EN CIBERSEGURIDAD

La educación en ciberseguridad es una gran preocupación para los padres de adolescentes. Como apunta el informe, el 50% de los padres de jóvenes entre 14 y 15 años afirma hablar regularmente con sus hijos sobre el tema. Sin embargo, el 14% de los adolescentes entre 16 y 18 años asegura que nunca ha hablado con sus padres sobre cómo protegerse 'online'.

Para mantener la seguridad en Internet de los más jóvenes de la familia, McAfee recomienda que los padres hablen sobre el tema con su hijos abiertamente y les desaconsejen interactuar con personas que no conocen en la vida real. La compañía también aconseja que los padres utilicen las mismas redes sociales que sus hijos.

Asimismo, la compañía de seguridad aconseja a los jóvenes que eviten compartir información de carácter personal, configurando, por ejemplo, la privacidad de sus redes sociales para evitar el ciberacoso, así como mantener las contraseñas privadas para no perder el control de la cuenta.