Autor: Antonio Peralta

Aunque muchos están ya familiarizados con esta tecnología, una gran parte de la población aún desconoce a qué nos referimos con Big Data, pudiendo definirse como el procesamiento de cantidades masivas de datos que no son posibles de analizar mediante las aplicaciones informáticas tradicionales por su volumen y/o variedad de información. Gracias a su uso, las compañías pueden conocer el perfil o hábitos de consumo de sus clientes, percepción del producto, alcance de sus propias acciones¿ Las aplicaciones son infinitas y benefician, tanto al empresario en la toma de decisiones, como al cliente que recibe un trato más personalizado sin que ello repercuta sensiblemente en su bolsillo.

A nivel global, más de 2,5 quintillones de bytes de información son generados diariamente en la red. Ante tal cantidad de datos, se torna esencial el procesamiento de los mismos de manera que la empresa no caiga en desventaja respecto a sus competidores debido a la facilidad de acceso a la información que caracteriza nuestros tiempos. Es por ello que, según el Informe de la Sociedad de la Información en España (SIE), realizado por Fundación Telefónica, el 35% de las compañías españolas invirtieron en Big Data durante el año 2016.

Es este gran crecimiento en el uso de estas tecnologías, el que hace que se vuelva asequible no sólo para los big players del mercado, sino que sea aplicable en las PYMES, auténticas estructuradoras del tejido empresarial en España. Los pequeños y medianos emprendedores no han tardado en subirse al carro y, según el SIE, el 50% muestra un gran interés en integrar el Big Data dentro de su estructura.

Sin embargo, no podemos entender la dimensión de los avances que implica el Big Data atendiendo únicamente el asunto desde el prisma de las empresas y su interacción con clientes, ya que también cuenta con el potencial para revolucionar y dar mayor credibilidad a un sector tan castigado últimamente, como son los medios de comunicación. En una época donde los hechos alternativos (alternative facts) tienen la consideración de noticia, es imprescindible tener las herramientas adecuadas para poder discernir la realidad de la mentira, la falacia o la inexactitud. Los números y su reflejo en la realidad son incontestables. No responden a interpretaciones, mientras se observen desde el mismo prisma y ofrecen una imagen clara y objetiva de la realidad a la que hacen referencia. Ante el panorama de desconfianza que en tiempos de la posverdad se ha instaurado hacia los medios de comunicación y nuestros representantes, conocer y analizar los hechos se torna más que necesario.

Pero no son estas sus únicas aplicaciones. De hecho, aún desconocemos el potencial total y cómo haremos uso de esta tecnología en el futuro más próximo. Por ejemplo, la capacidad de análisis de datos históricos puede ser beneficioso a la hora de la prevención de desastres naturales. UNICEF ha hecho uso de esta tecnología de manera experimental en Colombia recientemente para realizar un estudio sobre cómo el procesamiento masivo de datos móviles podría haber subsanado parte del daño posterior ocurrido tras los tres desastres naturales que tuvieron lugar en la región durante 2015 aprovechando la correlación existente entre la concurrencia de un gran evento o desastre y un aumento en el consumo de datos móviles. Las conclusiones indicaron que el uso de esta tecnología hubiese permitido mejorar el tiempo de reacción ante alerta de riesgo y obtener un mejor seguimiento de la recuperación de los territorios afectados. Otro ejemplo podría ser los resultados obtenidos del estudio realizado por 02, filial británica de Telefónica, junto a la Universidad de Trento. En el mismo se trató de crear una metodología que permitiese predecir los lugares más propensos a ser escenario de un crimen en la ciudad de Londres, a través del uso de datos móviles agregados y anónimos. El estudio concluyó que el uso de Big Data mejoró inmediatamente la exactitud de las predicciones policiales en un 6%.

Queda probado entonces que aún estamos solo adentrándonos en el mundo del Big Data y queda por definir cómo encajarán definitivamente en nuestra sociedad sus diferentes aplicaciones. Sobre estos y otros temas relativos a esta tecnología se discutirá en los eventos enmarcados dentro de Focus Week: Big Data in Action, organizado por Telefónica Open Future. Varias actividades serán organizadas entre el 15 y 19 de mayo en las que se podrá participar de manera física y online para tratar de arrojar un poco más de luz sobre este tema de tan inmediata actualidad.

Será la tercera edición de esta iniciativa colaborativa entre algunos de los distintos países donde Open Future_ se encuentra presente. En esta ocasión, se organizarán eventos en nuestros espacios de Wayra en Alemania, Brasil, Chile, Colombia, España, México, Perú, Reino Unido y Venezuela además de en el Crowdworking de Segovia. Durante el año pasado se realizaron otras dos Focus Week, la primera dedicada a Actitud Millennial y una segunda que versó sobre el emprendimiento femenino bajo el nombre de Women¿s Age.

 

Este post fue publicado originalmente en Blogthinkbig.com