Las eléctricas que cotizan en la bolsa española viven momentos complicados. El sector en su conjunto ha perdido algo más de 4.200 millones de euros en tan solo tres sesiones. El castigo ha estado propiciado por el hachazo fiscal que prepara el Gobierno para estas compañías a partir de 2023.
Esta semana el primer aviso lo dio la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz. El pasado lunes, la también vicepresidenta segunda propuso elevar la tasa del impuesto sobre sociedades en 10 puntos a las “grandes empresas energéticas”.
Esa jornada, el sector evitó las caídas en el parqué. Un día después ya no lo logró. El martes, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, apuntó la posibilidad de aplicar un recargo fiscal a las compañías eléctricas a partir de 2023.
Así lo explicó en una entrevista en TVE en la que no quiso dar muchos más detalles. Solo en esa sesión bursátil el sector perdió 3.700 millones de euros. Las caídas llegaron a alcanzar el 3%.
La jornada del miércoles también se saldó con fuertes pérdidas para estas compañías. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, explicó que la decisión de gravar de alguna manera a las eléctricas ya estaba “tomada y comunicada”.
Sin detalles
El Ejecutivo no ha aclarado -por ahora- ni las empresas afectadas ni el formato del recargo fiscal. Según ha publicado este periódico, Hacienda baraja la posibilidad de extender el gravamen a más empresas del sector energético, como Acciona o Repsol. Sobre la segunda cuestión, desde los ministerios apuntan a que la posibilidad que se maneja sería un recargo en el Impuesto de Sociedades.
Esta no es la primera vez que el sector eléctrico sufre en el parqué las medidas propuestas por el Gobierno de coalición. A mediados del pasado septiembre las cotizaciones de las eléctricas ya se vieron fuertemente presionadas por la batería de medidas que el Ejecutivo puso en marcha por entonces para intentar reducir la factura eléctrica.
Caídas
En este caso, el mayor impacto lo ha sufrido Iberdrola, por ser precisamente la que cuenta con una mayor capitalización. El golpe acumulado entre el martes y el jueves -cuando rebotó un 3,82%- es de casi 1.300 millones de euros. Ahora su valor ronda los 63.150 millones de euros. La caída, en porcentaje, roza el 2%
En cerca de 1.000 millones se ha reducido el valor de Naturgy en el mismo periodo, al caer un 3,76%. La gasista vale ahora menos de 26.000 millones. El descenso de Endesa ha alcanzado el 4,2%, un porcentaje que equivale a 860 millones de capitalización bursátil. Su valor ha caído por debajo de los 19.600 millones.
Pero las pérdidas no se han limitado a las compañías más señaladas por la medida. La capitalización de Redeia (la antigua Red Eléctrica) se ha reducido en 350 millones y la de Enagás, en 275.
Las renovables Acciona Energía y Solaria han perdido 420 y 40 millones, respectivamente. Acciona, por su parte, se ha dejado algo más de 12 millones por el camino.
Más medidas
Por ahora, el hachazo fiscal propuesto por el Gobierno al sector eléctrico se ha saldado con la pérdida de esos 4.200 millones en bolsa. Tras las dos jornadas de fuertes caídas, la mayoría de ellas cerraron la sesión del jueves al alza.
Pero el castigo por parte de los inversores podría no haber terminado para estos valores. La semana que viene el Congreso aprobará lo que se conoce como 'dividendos al CO2'. Con el respaldo de la mayoría del Congreso en Comisión, su objetivo es minorar la retribución sobrevenida de aquellas tecnologías que no son emisoras de C02.
El Parlamento también dará el visto bueno al Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE) supondrá un nuevo coste para petroleras y gasistas. Tendrán que contribuir a este ‘fondo verde’ que financiará los costes fijos de las políticas de fomento de las renovables, la cogeneración de alta eficiencia y la valorización energética de los residuos (RECORE).